Familiares de dos franceses desaparecidos en Guayaramerín (Beni) hace casi dos años elevaron una queja al fiscal General, Mario Uribe, porque la comisión de cuatro fiscales asignada al caso trabajó cinco días en la ciudad y retornó a la sede de sus funciones.
“Queremos saber cómo este equipo de fiscales puede ayudar a la Dra. C. Natusch (fiscal del caso) y trabajar seriamente sobre un caso sin quedarse en el lugar de las investigaciones”, cuestionaron en la misiva Cécile Blanloeil y Patrick Bellanger, padres de uno de los desaparecidos el 29 de agosto de 2010. “Una vez más, podemos constatar que el Gobierno boliviano no se preocupa de ninguna manera del caso de la desaparición de nuestros hijos y se limita a crear comisiones fantasmas. Es una vergüenza”.