Es innegable el crecimiento de casos de violencia contra sectores vulnerables en los últimos años y las mujeres no están exentas del flagelo. Entre 2018 y el primer semestre de 2024 se reportaron más de 250.000 denuncias, pero solo en 2023 hubo 42.788.
El informe denominado Delitos de alta vulnerabilidad contra la mujer, del Observatorio Boliviano de Seguridad Ciudadana y Lucha Contra las Drogas, dependiente del Ministerio de Gobierno, publicó la estadística de ese periodo.
Llama la atención la gráfica según los casos reportados por cada año. Por ejemplo, en 2018 hubo 35.463 casos denunciados; en 2019, 37.693; en 2020, 32.385; en 2021, 38.002, y en 2022, 41.983. En todos los casos, según se muestra en el cuadro, la mayor parte de las denuncias ocurrió en el segundo semestre del año.
Denuncias
Hasta el primer trimestre de este año, la cifra de denuncias de violencia a la mujer llegó a 20.449.
La mayor concentración de denuncias involucra al delito de violencia familiar, con un 76,84%; seguida de las denuncias de abuso sexual (7,03%), violación (5,26%), violación de infante, niña o adolescente (4,42) y estupro (3,51). Otro dato relevante es el de corrupción de niña, niño o adolescente (0,43%), que, junto a la violación de menores de edad, representa a las niñas y adolescentes como población vulnerable.
En cuanto a la distribución porcentual de denuncias de estos delitos por departamento, encabeza Santa Cruz con el 38,80% (96.910 casos), seguido de La Paz con 22,18% (55.393), y Cochabamba, con 15,24% (38.058), en el eje central; mientras que, en el interior, Tarija lleva el porcentaje más alto, con 7,62% (19.035).
En el caso de violencia familiar, el grupo etario más afectado es el de entre 18 y 29 años, que alcanza un 33,04% de denuncias; entre 30 y 39, 31,16%; de 40 a 49, 17,32%; de 50 a 59, 6,71%; de 60 a 69, 3,39%; más de 70, 2,47%, y las menores de 18 años, 4,46%.
Violencia
El 38,80% de los agresores en casos de violencia familiar son los concubinos, mientras que el 18,81% son las exparejas de las víctimas. Un 17% son familiares y el 14, 42% son cónyuges. Las agresiones por parte de parentesco por afinidad llegan a 4,46% y el 2% por de parte de las parejas sentimentales.
Entretanto, el 43,8% de las denuncias por acoso sexual contra la mujer tiene como víctimas a menores de 18 años, mientras que el 32,85% son de 18 a 29 años; 14,6% de 30 a 39; 5,84% de 40 a 49.
Otro dato interesante de ese boletín es la estadística de los casos de feminicidios, que también están contabilizados desde 2018 hasta junio de este año.
Mujeres
En 2018, ese ilícito tuvo 107 víctimas; en 2019, hubo 116; en 2020, 113; en 2021, 108; en 2022, 95; en 2023, 81, y en el primer semestre de 2024, 45. El rango de edades también es otro punto de la estadística. El 34,21% tenía entre 18 y 29 años, mientras que el 34,21% tenían entre 30 y 39. El resto de casos comprenden edades desde 18 y hasta 70 años.
Defensoría. Ante la crecida de los casos de violencia contra las mujeres y luego de un estudio al respecto, la Defensoría del Pueblo declaró 2024 como el Año Defensorial contra la Violencia hacia las Mujeres. En este marco, esa oficina proyectó cuatro acciones que se ejecutarán a lo largo de este año, para aportar en la lucha contra este flagelo y evitar que más mujeres sean víctimas.
En su plan de acción, la Defensoría proyectó verificativos trimestrales a instituciones que brindan atención a víctimas de violencia, seguimiento a las denuncias que lleguen a la entidad defensorial, capacitación con servidores públicos y coordinación de acciones con la sociedad civil para prevenir la violencia.
Defensoría
“Queremos ofrecerles este año, esta declaratoria defensorial para que podamos andar juntos en este emprendimiento y hacer esta exigencia al Estado para que aporte en la obligación que se asume cuando se suscriben compromisos internacionales en la defensa de las mujeres, también se asumen obligaciones esas obligaciones dentro del país”, remarcó el defensor del pueblo, Pedro Callisaya, luego de leer la declaratoria en el marco del Encuentro de Liderezas que se llevó a cabo el 8 de marzo de este año.
En su plan de acción, se incluyó “más acciones defensoriales”, en alianza con organizaciones de la sociedad civil, cooperantes, universidades, entidades del nivel central del Estado y entidades territoriales autónomas, para prevenir y luchar contra la violencia hacia las mujeres, sobre todo entre poblaciones en situación de vulnerabilidad.
Ya en 2013, en la gestión del expresidente Evo Morales, el gobierno buscó un mecanismo para proteger a las mujeres, considerado un sector vulnerable, por la exposición a hechos violentos. En ese afán, el 9 de marzo de ese año, el entonces mandatario promulgó la Ley 348, “Ley Integral para Garantizar a las Mujeres una Vida libre de Violencia”, que protege a las mujeres de cualquier tipo de violencia.
Ley 348
Sin embargo, ante el crecimiento de casos de violencia, el mismo Pedro Callisaya consideró que “la violencia contra las mujeres continúa siendo un problema grave y estructural en Bolivia”. Por esa razón, exhortó, en abril de este año, a la Asamblea Legislativa a priorizar ajustes de fondo a la mencionada norma.
Sin embargo, la preocupación sobre la violencia contra las mujeres se agrava con casos de muerte de las víctimas. Este extremo es recurrente en los últimos años, con la consecuencia de también niños huérfanos.
En el último informe sobre feminicidios en el país, publicado el agosto de este año, el fiscal general del Estado, Juan Lanchipa, dijo que hasta esa fecha había 59 casos. Junto con esa información dio a conocer los hechos de infanticidios, que entre el 1 de enero y el 25 de agosto llegaron a 22. En ambos casos, la mayor parte se concentró en el eje del país.
Delitos
Indicó que una comisión instaló la Mesa Nacional Interinstitucional de Lucha contra la Violencia de Género con la tarea de reducir esos índices.
En el detalle de la información, La Paz tuvo 15 casos de feminicidio, Cochabamba 13, Santa Cruz 11, Tarija siete, Oruro cinco, Potosí cuatro, Chuquisaca dos, Beni dos y Pando cero.
Aún falta poco más de tres meses para que acabe el año. La cifra de feminicidios es alta; se encuentra a una veintena de casos registrados el año pasado.
En 2023 se registraron 81 feminicidios en total, un 14% menos a las 95 muertes de 2022, según información publicada en enero por el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo.
