Surgen más denuncias de muertes en un asilo
Maltrato. Aprehenden a la dueña del geriátrico
Sonia Chávez, dueña del geriátrico Los Ángeles y acusada de ocasionar lesiones graves en un anciano de 77 años, que le habrían causado la muerte, fue aprehendida ayer. Hay otras dos denuncias de fallecimientos por maltrato.
La Razón publicó el lunes el caso de don Erlín Lara, quien fue internado en el asilo, ubicado en la zona de Pacata Alta, en Cochabamba. El señor contó que recibía maltratos y sus familiares, junto a autoridades locales y la Policía, lo rescataron el 17 de septiembre. Días después falleció a causa de una falla multiorgánica.
Realizada la denuncia y al recibir la declaración informativa de la acusada, la fiscal de Homicidios, Claudia Mansilla, determinó su aprehensión. “Se analizaron las pruebas, protocolos de autopsias, declaraciones e informes y se ha determinado la aprehensión de Sonia Chávez”, dijo. La propietaria del asilo, que se determinó era ilegal, fue remitida a celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) y hoy será presentada ante un juez cautelar.
En la audiencia pública, Chávez negó las acusaciones y dijo que era enfermera auxiliar. “Me dedicaba al cuidado de ancianos. Cómo voy a golpear y pegar, si todos vamos a ser viejos en la vida”, afirmó. Respecto a los hematomas en el cuerpo, brazos, cara y la fractura en la costilla que presentaba don Erlín antes de morir, la denunciada aseguró que se cayó de la silla de ruedas. “Lo levanté, lo puse en la silla, le revisé su cuerpito y no estaba adolorido. Nunca lo golpeé”, aseveró.
Cuando fue rescatado, don Erlín fue atendido en la clínica Boliviano Americana. En el centro se diagnosticó la existencia de deshidratación, desnutrición y lesiones equimóticas en el cuerpo. Había perdido un diente producto de los golpes, tenía contusiones en el rostro, oído y una costilla fracturada, lo que provocó una hemorragia interna.
Los familiares filmaron un video en el que el anciano contó, antes de fallecer, que fue golpeado por Chávez. “Me daba puñetes y me pegaba con garrote”, sólo porque no quería comer. “En vez de una casa de retiro me llevaron a una casa de torturas”, dijo. “No sabía cómo escapar del lugar, habrá que averiguar a cuántos más los trataron así”, pidió antes de morir el 21 de septiembre.
Denuncias. En la audiencia se presentaron familiares de otros ancianos, quienes también recibieron maltratos en el asilo y dos habrían fallecido. Hace dos años, Yolanda Loayza internó a su papá Raúl Loayza (82). “No nos dejaban verlo, decían que estaba durmiendo. Cuando pude verlo, él me dijo ‘sacame de aquí’. Lo vi con hematomas en la rodilla y la señora (Chávez) manifestó que se cayó. Don Raúl tenía hematomas en brazos, rodillas y en los oídos. Lo internaron en el hospital y falleció dos semanas después, el 20 de febrero de 2010.
M.V. (82) fue otra víctima. Su hijo contó que la anciana fue internada de emergencia, luego de permanecer en el asilo por un mes y medio. “Tenía moretones en todo el lado izquierdo, fracturas en dos costillas, doña Sonia dijo que se cayó”, relató el hijo, que pidió guardar su nombre en reserva. La señora falleció al día siguiente de ser internada.
Lucio Ávila denunció que su abuelita, Felicidad Gutiérrez, tuvo que ser sacada a escondidas. “La mujer mucho me pega, parece loca”, le había dicho la anciana. “Supimos que una señora falleció dos días antes, por lo que acordamos sacarla de ocultas. La llevamos a la casa y estaba con varios moretones”.