Proyectan dos terminales en dos distritos de El Alto
La Alcaldía de El Alto tiene entre sus proyectos dos terminales interprovinciales. Una será construida —aún no existe una fecha para el efecto— con un crédito del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la otra con dinero del Gobierno nacional.
El oficial mayor de Obras y Medio Ambiente de la Alcaldía, Carlos Lima, explicó que la primera tiene un financiamiento de 49 millones de dólares. Este monto no sólo será utilizado para la parada, sino en dos polos de desarrollo, en uno de los cuales se construirá una de las terminales. “Estos polos de desarrollo alternativo, ubicados uno en el Distrito 8 y otro en los distritos 5 y 14, consisten en mercados, centros de abastecimiento y centros administrativos, que abrirán la oportunidad a los bancos, entre otros”, dijo.
En cuanto a la segunda, la autoridad municipal afirmó que el presidente Evo Morales solicitó que se realicen estudios a diseño final para su construcción en el sector de la extranca a Río Seco.
Lima cree que la instalación de los dos polos de desarrollo demorará unos tres años, tiempo que considera prolongado y que esta ciudad no puede esperar.
Anunció que por ese motivo coordinó con el Gobierno la edificación de otra terminal en el sector norte. “Ésta debe hacerse de manera prioritaria y será de servicio para el sector oeste, a Copacabana y Desaguadero, donde hay más afluencia que hacia Oruro, donde hay transporte interdepartamental”, manifestó.
En cuanto a la parada interdepartamental, explicó que cuando se construya también tendrá servicios interprovinciales, pero a lugares cercanos a El Alto. “Tenemos algunos avances interesantes, ésta pasará de bimodal a multimodal”. Anunció que ya identificaron un sitio para construirla, aunque no dijo dónde.
Vecinos dicen que paradas provocan inseguridad
Las paradas de transporte interprovincial provocan el rechazo de los vecinos y de algunos comerciantes, porque ambos grupos consideran que las calles utilizadas con ese fin se convierten en parqueos improvisados, dificultan el tráfico vehicular, atraen a los delincuentes y son sucias.
“Se ha visto que por la presencia de los minibuses, los delincuentes están merodeando. Si no logran quitarle algo a algún pasajero, se acercan a nuestros puestos”, relató Mariana Ticona, comerciante en la avenida Panorámica, ubicada detrás de El Ceibo, cerca de la parada a Achacachi.
En el mismo sector, los choferes se quejan a su vez del asentamiento de los comerciantes que, dicen, les quitan espacio para estacionar. “Es difícil, el problema no somos nosotros sino ellos (los vendedores), que se creen los dueños”, dijo Félix Tórrez.
En la extranca de Río Seco, los vecinos también se oponen a estas paradas. “No sabemos quién dio la autorización, pero esta terminal no debería existir”, indicó Renato Quisbert.
Terminales accidentales son motivo de congestión
Las 13 terminales accidentales, ubicadas en la misma cantidad de puntos de El Alto, provocan congestionamiento vehicular y ocupan espacios que están destinados al tránsito vehicular.
El jefe de Planeamiento y Operaciones del Organismo Operativo de Tránsito (OOT), teniente coronel Édgar Chuquimia, consideró que los carriles que ocupan los vehículos de transporte interprovincial podrían, de estar despejados, ayudar a mejorar la circulación de los motorizados.
“Para ser más precisos, la terminal de buses, el sector de El Ceibo —de donde salen a Desaguadero— y la extranca de Río Seco son las más conflictivas para nosotros”.
Chuquimia destacó que cada día 118 mil vehículos circulan por El Alto y que esa demanda requiere más vías.
El oficial mayor de Obras y Medio Ambiente de la Alcaldía, Carlos Lima, coincidió con Tránsito en que se debe controlar las paradas interprovinciales, porque, además, reveló que éstas tienen permisos eventuales y no permanentes.
Sólo tres paradas en Villa Dolores y 12 de Octubre tienen oficinas de atención a los pasajeros.
Los puntos de los camiones se encuentran en las avenidas Panorámica y Tiwanaku, frente al regimiento Ingavi. Allí tampoco existen oficinas para la atención de los viajeros.