Crecida de cinco ríos en el Sur daña 2 puentes y canalizaciones
Debido a la precipitación se reportaron 39 casos de emergencia. Los eventos más importantes se produjeron en la zona Sur por el colapso de los ríos Achumani, Jilusaya, Huayñajahuira, La Paz e Irpavi.
La crecida de cinco ríos en el Sur de La Paz, debido a una fuerte lluvia y granizada que cayó entre el miércoles y jueves, destruyó parte de la estructura de contención de los caudales, dañó dos puentes y ocasionó sifonamientos en la avenida Costanera, cuyo carril de subida fue cerrado.
Las obras de emergencia encaradas por el Gobierno Municipal y el corte de la circulación vehicular en la Costanera, entre las calles 8 y 13, colapsaron el tráfico vehicular en esta zona.
“Hemos tenido un evento extraordinario. Una granizada nos han generado importantes caudales. Esto ha ocasionado la pérdida de obras hidráulicas puntuales”, informó el titular de la Dirección Especial de Gestión Integral de Riesgos (DEGIR), Vladimir Toro.
Según el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), entre las 23.00 del miércoles y las 06.00 de ayer cayó una precipitación de 34,4 litros por metro cuadrado, la más fuerte en lo que va del año.
Debido a la precipitación se reportaron 39 casos de emergencia. Los eventos más importantes se produjeron en la zona Sur por el colapso de los ríos Achumani, Jilusaya, Huayñajahuira, La Paz e Irpavi.
El problema más serio se presentó en la confluencia del río Jilusaya y Achumani, que causó el colapso del muro hidráulico y daños en la infraestructura de dos puentes.
En la calle 12 de Calacoto, a la salida de Irpavi, el agua se llevó parte del paso para peatones del puente y un poco más arriba, en el ingreso del Colegio Militar, el caudal quebró la baranda protectora del puente y parte del pavimento.
Según la DEGIR, el caudal del río Achumani se elevó a 7 metros cúbicos de agua por segundo, y en el Huayñajahuira —habitualmente seco— a 5,9 metros cúbicos por segundo.
En la cuenca del río Huayñajahuira, la erosión de los taludes en Las Ánimas y Ovejuyo generó material de arrastre que dañó la estructura hidráulica de ese curso de agua, que corre paralelo a la avenida Costanera.
Sobre esta vía se produjeron dos sifonamientos, uno cerca de la calle 20, al ingreso al barrio de Auquisamaña, que tiene un diámetro de seis metros por tres de profundidad. Debido a ello el carril de subida de esta arteria estará cerrado entre dos y tres días para realizar los trabajos de reposición.
“Aguas abajo tenemos otro sifonamiento, en la calle 13. En ese mismo sector tenemos pérdida de 15 metros longitudinales del muro colindante (río Huayñajahuira) hacia la Costanera”, detalló Toro.
Durante la jornada también se registraron problemas en el río Achumani, que perdió parte de su estructura hidráulica a la altura del sector Jardines del Sur. En el río La Paz se perdieron escolleras (obras que resguardan del oleaje) cerca de la zona Amor de Dios. En el río Irpavi, desde el Psiquiátrico hastaAruntaya, se perdieron camellones (defensivos). En Alto la Florida, el muro de una casa colapsó, al igual que una vivienda de adobe de 4×3 en Villa Pabón.
Sigue alerta amarilla
Alcaldía
El alcalde de La Paz, Luis Revilla, descartó elevar la alerta de amarilla a naranja debido a las últimas precipitaciones pluviales. “(Las emergencias) no han superado la capacidad operativa”.
Alcaldía hará adjudicaciones directas por la emergencia
La Dirección Especial de Gestión Integral de Riesgos (DEGIR) adjudicará de manera directa los trabajos de reposición y reparación de los daños ocasionados a la estructura hidráulica de los ríos Irpavi, Achumani, Huayñajahuira, La Paz y Jilusaya.
“Se debe realizar la reposición de muros, la reparación de los puentes y otros problemas que se suscitaron. Para ello estamos contratando empresas para que realicen los trabajos de mayor envergadura”, manifestó Vladimir Toro, cabeza de la DEGIR.
La contratación directa de las firmas se hará a través del registro de empresas que efectúan labores por especialidad del Gobierno Municipal y en cumplimiento de la Ley Municipal de Riesgos.
Los problemas de menor envergadura serán atendidos por los mismos obreros y la maquinaria del Gobierno local, a través de sus Bases Bravo.
“Estamos disponiendo el personal necesario para realizar la limpieza y la reposición de los daños menores”, informó ayer el funcionario municipal.
