Icono del sitio La Razón

Hay malestar en las facciones de los choferes sindicalizados

Las dos fracciones de los choferes sindicalizados de La Paz manifestaron ayer su molestia porque el gobierno edil no tomó en cuenta sus propuestas al establecer la nueva escala tarifaria.

Julián Manzaneda, dirigente de los choferes que prestan sus servicios en la hoyada, convocó para el lunes, día en que comienza a regir el nuevo tarifario, a una reunión a los secretarios generales de los 22 sindicatos a los que representa, para tomar una posición.

“Nosotros hemos presentado nuestra propuesta al Alcalde y él no la ha considerado y ha sacado sus  tarifas sin haber consensuado con el sector”, dijo a la agencia estatal René Vargas, ejecutivo de la Federación Departamental de Choferes de La Paz 1° de Mayo, y anunció que el lunes presentará al Alcalde una nota para discutir la escala aprobada.

Añadió, siempre según ABI, que “no garantiza el servicio con las nuevas tarifas”. Sin embargo, con este diario se mostró más cauto. “Oficialmente no conozco, primero quiero ver cuáles son los montos. Voy a tener un criterio mañana (hoy) sobre si estamos de acuerdo o en desacuerdo”, dijo.

El sector de Manzaneda, que está divorciado de la Federación 1° de Mayo, planteó el congelamiento de las tarifas de todas las modalidades de transporte en los tramos cortos y un alza de entre 33% y 140% en los tramos largos. Además solicitó que el horario nocturno rija entre 19.00 y 06.00 y se cobre un recargo de Bs 0,50.

Vargas propuso cinco alternativas sólo para minibuses. De éstas, una planteaba una tarifa única de Bs 2 para todos los recorridos y tres, diferentes montos para tres tipos de tramos: medios, largos y extralargos y un recargo nocturno de Bs 0,50.

El presidente de la Federación de Juntas Vecinales, Arturo Quispe, expresó, a su vez, su apoyo al congelamiento de los pasajes en los tramos cortos. “La mayoría de la gente va del centro a las laderas y de las laderas al centro y estas tarifas se han congelado”, recalcó. Según él, el tarifario aprobado es un punto intermedio entre las propuestas de los choferes, la Alcaldía y la demanda vecinal.