El gobernador del departamento de La Paz, César Cocarico, se reunió ayer con dirigentes de San Pablo de Tiquina con la finalidad de convencerlos de la necesidad de construir un puente en el estrecho del lago Titicaca.
El encuentro se efectuó ayer desde las 17.30, en predios de la Junta Vecinal de San Pablo, y en él participaron representantes de los ministerios de Producción, Medio Ambiente y Agua, Desarrollo Rural, del Viceministerio de Turismo y de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC), además de la Defensoría del Pueblo de La Paz. Hasta el cierre de esta edición, a la 01.00, la reunión continuaba y el punto de la edificación del pontón fue el que se debatió durante gran parte de aquélla.
Cocarico junto con los representantes del Gobierno explicaron los beneficios y los motivos por los que se debería construir dicha obra entre San Pedro y San Pablo. “Se está tratando el tema de la construcción del puente, pero también los dirigentes están pidiendo otros temas más, como desarrollo social e integral en el lugar”, informó a La Razón la representante de la Defensoría del Pueblo La Paz, Teófila Guarachi. También comentó que el diálogo se tornó áspero por las nuevas demandas que exigieron los habitantes de San Pablo.
El 12 de abril, la Gobernación de La Paz y los comunarios de la provincia Manco Kápac, que bloquearon la carretera a Copacabana en plena Semana Santa durante 16 días en demanda de tres puentes denominados Wiñay Marca, pactaron la instalación de uno sobre el estrecho de Tiquina.
Entonces el gobernador Cocarico se comprometió ante la federación de campesinos a convencer a los pobladores de San Pablo de Tiquina de que acepten el proyecto.