La empresa Tratamiento de Residuos-Bolivia (Trébol) fue la única que se presentó a la convocatoria internacional para la limpieza de El Alto y se adjudicó este trabajo por diez años. Durante el proceso, hubo denuncias de que aquélla estaba dirigida a favorecer a esta compañía.
El 22 de febrero, la Empresa Municipal de Aseo El Alto (Emalt) emitió a través del Sistema de Contrataciones Estatales (Sicoes) la Licitación internacional 0001/2013 para el recojo, recolección y transporte de desechos.
“La apertura de sobres se realizó el viernes 12 de abril. Se hizo en un acto público en el que se pudo evidenciar que una sola empresa, en este caso Trébol, se había presentado a la licitación. El 22 de abril, ésta se adjudicó el trabajo”, explicó el jefe de la Unidad Técnica de Emalt, Édgar Blanco.
El 1 de abril, vecinos del Distrito Municipal 7 denunciaron, mediante una nota, al Ministerio de Transparencia Institucional y Lucha contra la Corrupción que el proceso estaba conducido a favorecer a la que ahora limpia la ciudad de El Alto. “La convocatoria muestra en el DBC (Documento Base de Contratación) condiciones totalmente dirigidas a la actual firma”.
Versiones. Esto fue negado por los funcionarios de Emalt y de la Alcaldía, quienes aseguraron que el proceso de contratación fue transparente. Empleados de la Alcaldía indicaron a La Razón que dos firmas estaban interesadas en prestar sus servicios en esta urbe pero que desistieron, supuestamente, por las razones esgrimidas por los habitantes del Distrito 7.
“Son las empresas Tersa y Atesa las que asistieron a las reuniones preliminares en las que se brindaron explicaciones de la convocatoria, pero luego en la apertura de sobres sólo estaba Trébol”, informó Guido Navarro, de la Unidad Técnica.
La operadora trabaja en El Alto desde el 22 de mayo de 2007. En esa ocasión, la Alcaldía decidió llamar de manera directa a Trébol, Colina y Sima, pero entregó el recojo de la basura a la primera. Esto ocurrió después de que las microempresas antes requeridas incumplieron con las especificaciones requeridas. El convenio con la firma Tratamiento de Residuos-Bolivia fenece en junio de 2013.
El nuevo contrato durará el doble que el primero, pues será por diez años. En todo ese periodo, la compañía se embolsará 670 millones de bolivianos, según fuentes municipales. Entre los requisitos que exigió la convocatoria internacional y que la recolectora se comprometió a dar cumplimiento, figuran: mejorar el parque automotor con vehículos nuevos y lograr la cobertura del servicio en el 100% de las zonas alteñas.
En El Alto existen, al menos, 800 barrios en 14 distritos y Emalt ajustó el contrato para mejorar la cobertura. “Había falencias en el recojo de la empresa, ahora con la experiencia se le va a exigir que llegue a todos los barrios”, afirmó Blanco.
La autoridad explicó que esas deficiencias pasaban por el diseño del servicio y el recojo de contenedores. “En la propuesta que ha hecho la compañía se tendrán, al menos, 60 vehículos nuevos entre camionetas, compactadoras, cisternas de lavado, recolección y de transporte de contenedores”, detalló Blanco.
Actualmente, la firma gana 3,5 millones de bolivianos al mes por el recojo de 15 mil toneladas. Con el nuevo contrato se mantiene el precio por tonelada. “Hay dos fuentes de recursos para el pago del servicio, una es la recaudación por la tasa de aseo unos 1,5 millones de bolivianos, y la segunda, la transferencia de 2 millones de bolivianos” de las arcas municipales.
Condiciones señaladas en el pacto
Si la empresa que se adjudicó el trabajo de recolección, recojo y transporte de basura en El Alto incumple algunas de las cláusulas del contrato y se evidencia falencias en el servicio, podrá perderlo. La Empresa Municipal de Aseo El Alto realiza la supervisión e indica las deficiencias.