La Policía y el Ministerio de Gobierno presentaron el viernes a los brasileños Helder Assis Araujo Fihlo y Jaia Bandeira Aragoña, que junto a dos bolivianos formaban una organización criminal de clonadores de tarjetas de débito.
‘Yo quiero felicitar a la Policía Boliviana por ese trabajo, cuyo antecedente tiene que ver con varias denuncias de movimientos bancarios que afectaron cuentas particulares’, dijo el ministro de Gobierno, Carlos Romero, en un acto en el que participó también el viceministro de Régimen Interior, Jorge Pérez.
Romero explicó que a la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) llegaron siete denuncias de personas que no realizaron movimientos económicos a través de cajeros automáticos, pero que establecieron que se quedaron sin saldos.
De acuerdo a la forma de operar (modus operandi) los delincuentes obtenían el número PIN y el código de las tarjetas de débito en complicidad con funcionarios de algunas entidades bancarias.
Posteriormente, con un equipo de última tecnología clonaban las tarjetas y retiraban dinero de las cuentas bancarias. Ese modo de operar fue descubierto a través de un seguimiento a las víctimas.
‘Es gente que se dedicó a retirar ilegalmente dinero de cuentas particulares afectando a varias personas’, subrayó Romero, quien aseveró que los dos brasileños confesaron la autoría del delito.
Por su parte, el comandante general de la Policía, Alberto Aracena, informó que para desbaratar a esa organización criminal se emplearon ‘agentes encubiertos’.
En esa dirección, el director nacional de la FELCC, Miguel Cardozo, mostró las pruebas del delito de la clonación de las tarjetas para cobro de dinero en Bolivia y el exterior, y al menos 35 números PIN, que fueron proporcionados a través del internet o anotados en pedazos de papel que -dijo- serán investigados.
Precisó que la operación policial se realizó el jueves a las 10h00, en la avenida 6 de agosto, en el edificio ‘Jardines’ piso 20, donde la pareja fue aprehendida en posesión de las pruebas del delito, por lo que serán acusado por falsedad material, asociación delictuosa, manipulación informática y otros.
La red está integrada también por los bolivianos Deniss H. Mercado y José Luis Mamani Osco, que fueron detenidos en el barrio Las Retamas de la zona Sur de la ciudad.
En poder de ambas personas, los policías encontraron una pistola calibre 9mm, un equipo electrónico (clonador de tarjetas), 40 tarjetas en blanco, 21 tarjetas de diferentes entidades bancarias de Bolivia, Chile, Brasil y otros países.
Además, 620 dólares, 4.000 bolivianos, 5 memorias portátiles (flash), 2 celulares, una impresora, una computadora portátil, un sello de pasaporte, pasaportes de ingreso al país, que serán investigados por Migración.
La red operaba en Bolivia desde 2011, año de ingreso de los brasileños que recorrieron diferentes departamentos, razón por la cual, la Policía Internacional (Interpol) investiga sus antecedentes.