Comunarios de la localidad peruana de Yanapata (Puno) retuvieron y enterraron el cadáver de un boliviano como pago a la Pachamama (Madre Tierra), sin el consentimiento de su familia, según reportó hoy el portal del diario peruano La República.
Hilarión Paye Quispe es el nombre del boliviano encontrado muerto el 14 de septiembre por un grupo de pobladores de Yanapata, comunidad ubicada en la provincia puneña de Yunguyo, en la frontera Perú-Bolivia, a orillas del lago Titicaca.
Tras haberlo encontrado, los habitantes de la población velaron el cuerpo del boliviano en una capilla de la región y un día después lo sepultaron en lugar deshabitado.
El entierro fue realizado sin la autorización de los familiares, que al enterarse suplicaron a los representantes de Yanapata les devuelvan el cuerpo para que sea sepultado en su natal Yampopata, un poblado del departamento de La Paz cercano a la popular Isla del Sol.
Las autoridades de Yanapata retuvieron arbitrariamente el cuerpo del difunto alegando que habían realizado los gastos para el féretro y la necropsia del cadáver.
“Nos dijeron que la muerte de una persona y el entierro en la zona es un buen augurio para una buena cosecha”, sostuvo Eusebio Paye Quispe, hermano del extinto, según el portal La República
La familia de Hilarión Paye Quispe confirmó que solicitó al consulado boliviano en Puno intermedie en el conflicto para recoger el cuerpo y llevarlo a territorio boliviano.
También hicieron conocer que solicitarán a las autoridades de ambos países para que se realicen las investigaciones pertinentes que determinen las causas de la muerte de su familiar, dado que presumen que no murió ahogado, sino asesinado.