Intendencia decomisa 400 borradores y 300 lápices tóxicos en los mercados de la ciudad de La Paz
El material, que lleva etiqueta adulterada de la marca Milán, contiene una alta concentración de plomo y cobre, que son dañinos para la salud. La Intendencia recomienda comprar estos productos en centros donde se emita factura.
En las dos últimas semanas de septiembre, la Intendencia de La Paz realizó operativos de control de puestos de venta de material escolar, en los que fueron decomisadas 400 gomas de borrar y 300 cajas de lápices falsificadas y con altos grados de toxicidad, informó a La Razón Digital la responsable de Defensa del Consumidor de la Alcaldía de La Paz, Carla Estrada.
Dijo que los operativos se realizaron después de haber recibido denuncias de la empresa Full Office, acompañadas de estudios de laboratorio realizados en España, que daban cuenta que este material, con sello adulterado de la marca Milán, era riesgoso para la salud.
“Recorrimos las calles Otero de La Vega y Garcilazo de la Vega y la avenida Tumusla de La Paz, más conocida como ‘La Tablada’, y luego de decomisar los productos evidenciamos que contenían gran cantidad de plomo y cobre”, indicó.
Dijo que el siguiente paso fue notificar a los comerciantes del sector para que aprendan a diferenciar los productos originales de los adulterados. “Las negociantes ya tienen el cuidado de comercializar estos productos tratando de no comprarlos si sospechan de su originalidad”, contó.
Guillermo Beltrán, gerente general de Andean Office, empresa dueña de Full Office, explicó que el material es falsificado en China y que comerciantes inescrupulosos los venden en Bolivia como si fueran originales. “Estamos muy preocupados porque los productos de la marca Milán se venden libremente y, además de tener un problema de desempeño, porque no cumplen las funciones para las que fueron diseñados como ocurre con los originales, tienen altos contenidos de plomo”, dijo.
El ejecutivo mostró a éste medio los estudios farmacológicos realizados en el Centro Tecnológico Riojado (CTR) de España, en los que se confirma la toxicidad. “El plomo se determinó en la disolución resultante, mediante espectrofotometría de absorción atómica con ionización de llama”, detalla el estudio.
Según Beltrán, esta condición no sólo afecta a la marca, sino que representa un peligro para quienes utilizan los productos. “Un niño puede ingerir (el tóxico) al mascar la goma o chupar el bolígrafo o el lápiz, y el plomo es un compuesto que una vez ingresa al organismo no puede ser eliminado. (…) Ese consumo, a la larga, puede generar problemas genéticos u ocasionar problemas estomacales, de circulación y mentales”, detalló.
Dijo que el precio tampoco es un parámetro que ayuda a identificar si el producto es original o falso. “La diferencia es amplia, pero eso queda en manos del comerciante inescrupuloso, que para venderlo como si fuera original no baja el precio y queda con un margen de ganancia bastante amplio. Si un producto original cuesta Bs 1.50 lo venden en Bs 1.10 y originalmente debe costar 20 centavos, esa es una forma que utilizan para no ser detectados”.
En el caso de los comerciantes minoristas, el empresario aconsejó que se aseguren de trabajar con importadores serios. “Lamentablemente estos distribuidores que van a la China y traen un contenedor de productos sorprenden a los comerciantes en su buena fe, la recomendación es que compren los productos de empresas autorizadas”.
Para evitar que los niños entren en contacto con las sustancias tóxicas detectadas en los materiales de escritorio, Carla Estrada recomendó a los padres de familia que traten de comprar el material escolar donde le entreguen una factura, que garantice que fue importado legalmente.