El Miércoles de Ceniza dio inicio ayer a la Cuaresma, que termina en la Pascua de Resurrección. En el país se celebraron misas y desde mañana comenzarán las peregrinaciones para emular el calvario de Jesús.
Según un documento de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), el Miércoles de Ceniza subraya el itinerario penitencial del tiempo de preparación (la Cuaresma) para la renovación de la fe de los creyentes. Con esto además concluyen las fiestas de Carnaval.
En La Paz se celebraron misas en las distintas parroquias, donde el padre impuso la cruz en la frente de los feligreses con la ceniza proveniente de las palmas del Domingo de Ramos del año anterior.
Este acto se lleva a cabo todos los años para recordar el versículo del Génesis de la Biblia, que señala el destino de todo ser: “del polvo vienes y en polvo te convertirás”.
En Santa Cruz, monseñor Sergio Gualberti, arzobispo de la Arquidiócesis, presidió ayer la eucaristía del Miércoles de Ceniza en la Catedral Metropolitana Basílica de San Lorenzo, de la plaza 24 de Septiembre, de acuerdo con la información de la agencia ANF.
Gualberti enfatizó que el símbolo de la cruz con la ceniza representa la conversión de un cambio real de la vida, el romper las cadenas del pecado, volver a Dios y creer en el evangelio.
“Como cristianos, este Miércoles de Ceniza iniciamos un tiempo de peregrinación interior hacia Dios, por eso la Cuaresma es un momento de profunda renovación”, señaló.
En la Iglesia de la Exaltación de Obrajes, en La Paz, informaron que mañana se llevará a cabo la primera peregrinación, en la que participan cientos de jóvenes que llegan de todas las zonas.
En tanto, el Gobierno Municipal de La Paz comenzará a partir de las 23.00 de hoy con los controles de seguridad a la peregrinación que realiza una multitud de personas en las siete semanas que dura el tiempo de la Cuaresma.