Apegados a la fe religiosa este jueves y viernes santo, los fieles católicos recuerdan la vida, muerte y resurrección de Jesucristo asistiendo a las iglesias para participar de la eucaristía y rememorar la última cena del cuerpo y la sangre de Jesús.
Bolivia es un país donde la mayoría de la población profesa la fe católica de ahí que en todas las ciudades y pueblos se realiza la tradicional procesión de vía crucis con la representación de los castigos que sufrió Jesús antes de ser crucificado.
La Semana Santa comienza con el domingo de Ramos cuando Jesucristo entra montado en burro a Jerusalén aclamado como el Mesías y representa el Misterio Pascual.
El Jueves Santo se inicia la Cuaresma, donde los obispo celebra la Misa de los Santos Oleos y recrean la sabia enseñanza que dejó Jesús como el lavado de los pies que significa la humildad y amor por el prójimo y la última cena de Jesús, con sus 12 discípulos antes de ser entregado sentenciado, condenado a muerte y crucificado.
«De mismo modo y acabada la ceremonia Jesús paso el pan a sus discípulos diciendo tomad y comed todos de él porque este es mi cuerpo que será entregado por vosotros para el perdón del pecado, también paso el vino diciendo tomad y bebed todos de él porque esta es mi sangre, sangre de la nueva alianza que será derramada por vosotros para el perdón de los pecados. Hagan esto en conmemoración mía», son las sabias enseñanzas de Jesús antes de ser entregado a su muerte.
En las ciudades capitales y las áreas rurales, los fieles católicos asisten a la misa cuaresmal para compartir la eucaristía y ser parte de esa enseñanza de compartir el cuerpo y sangre de Jesús representada en el pan y el vino. También se visitan 12 iglesias rememorando el via crucis de Jesús.
El viernes santo se recuerda el viacrusis y el recorrido que hace Jesús coronado de espinas, cargando la cruz donde será clavado. En ese recorrido Jesús recibe los azotes e insultos de la guardia romana, cae exhausto en tres ocasiones y vive además el inmenso dolor de su madre, María, y de María Magdalena.
El sábado de gloria se celebra la vuelta del espíritu de Cristo al reino de Dios. El domingo de resurrección se alcanza el momento de mayor júbilo en este calendario: Jesucristo vuelve desde la muerte.