Herlan Rojas era los ojos de su madre invidente
Según los vecinos, el motorizado que arrolló al niño de 10 años esquivaba un bloqueo de los transportistas. Su dueño no lo auxilió y está desaparecido hasta el momento
Herlan Rojas, un niño de diez años, murió el miércoles atropellado por un vehículo. Según los testigos, el motorizado que lo embistió fue un RAV 4, de color dorado; aunque no se tiene completo el número de placa, se sabe que está formado por los dígitos 2054. El menor ayudaba a su mamá invidente, desde hace un año, a vender pasteles y masas.
La madre del pequeño, Lidia Callisaya, una mujer que quedó invidente a causa de una enfermedad, dijo que Herlan le ayudaba también a caminar por la calle. “Él era mis ojos, me ayudaba a que la gente no me engañe con el cambio… y ahora no está más”.
“Yo hago queques y rollos, antes no quería que vaya conmigo porque era muy pequeño. El año pasado recién acepté. Ahora exijo y pido justicia para él”. Explicó que aprendió a hacer queques antes de quedar invidente y que ahora lo hace con ayuda de su esposo y sus hijos, de los que quedan tres: una niña de 13 años y dos niños de siete y cuatro años.
El cuerpo de Herlan, dentro de una ataúd blanco, fue velado en una iglesia evangélica de la calle 7 de la zona Santiago II y fue sepultado en el Cementerio General de La Paz a las 15.00 de ayer.
Según la señora, el niño salió de su domicilio a las 08.00 a comprar pan, para luego irse a su colegio, Villa El Carmen, en la zona del mismo nombre. Era alumno del 3° de primaria. “Fue a comprar, pero no retornaba. Salí a la calle como pude y me enteré que mi hijo estaba tendido en el piso. No había ayuda, no había nadie; la gente que estuvo cerca dijo que quien lo atropelló no le prestó auxilio, al contrario aceleró y escapó”. Herlan estaba a punto de cruzar la vereda en la calle 15 de Santiago II, cuando el vehículo dorado lo impactó a gran velocidad y lo dejó tendido en la calzada.
Según los vecinos, por esta calle no circulan muchos coches, pero el bloqueo de los choferes ocasionó que los autos busquen rutas alternas. La calle 15 fue una de ellas, ya que los accesos para ingresar a la avenida 6 de Marzo estaban bloqueados.
Gabriela Callisaya, tía de Herlan y hermana de Lidia, pidió justicia a nombre de toda la familia y describió al niño como cariñoso y conversador. “Yo creo que la necesidad de atender a su mamá hizo que él tenga ese carácter”.
Además contó que su hermana perdió la vista debido a la diabetes y que necesita un trasplante de córnea para recuperar la visión. “Ojalá que el Gobierno la apoye para dar con el autor y para recuperar su vista”.