Una treintena de vecinos, con pancartas, protestó ayer en puertas de la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen (FELCC) de El Alto por una supuesta estafa y obligó a cerrar esas instalaciones.
Los afectados señalaron que habían comprado 154 lotes de terreno en la zona Ingavi B hace más o menos 18 años, pero hasta el momento no cuentan con documentos.
Indicaron que la propietaria, Carmela C., no les entregó los testimonios con evasivas, y que en los últimos días ésta les informó que devolvería el dinero ($us 2.000 por lote) y que demolería con tractores las viviendas construidas. Ellos piden la entrega de sus documentos y la intervención de la Policía.