Vecinos de El Alto impidieron ayer que el pasaje de los minibuses en los tramos cortos se incremente de Bs 1 a Bs 1,20, pese a que la Alcaldía lo puso en vigencia desde ayer y los choferes intentaron cobrarlo.
Los habitantes de esta ciudad simplemente se negaron a pagar Bs 1,20. Entre los argumentos que esgrimieron estuvo que desconocían la decisión del gobierno local y que no veían ningún cambio en la actitud y servicio de los transportistas públicos.
“Vine desde la 16 de Julio. No pagaremos 1,20 bolivianos porque no se ha visto un cambio en el trato hacia los pasajeros y siguen haciendo recorrido por tramos. Son un engaño los estudios y las mejoras en transporte”, dijo Roberto Cárdenas, de la zona Ballivián.
La Razón comprobó que los transportistas del sector norte de la ciudad pretendían elevar el pasaje, pero los usuarios desobedecían y discutían con los choferes. En el sector sur de la urbe, los conductores ni siquiera intentaron cobrar más de Bs 1.
“Seguiremos cobrando 1,20 bolivianos hasta que la gente entienda que el pasaje debe subir. Esta medida es transitoria, nuestra postura es cobrar un pasaje único de 1,50 bolivianos”, aseveró el secretario ejecutivo de la Federación Andina de Choferes 1° de Mayo, Rubén Sánchez.
El secretario de Transporte de la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve), Renán Cabezas, anunció que pedirán una aclaración de la Alcaldía respecto al incremento. “El Alcalde debe explicar al pueblo por qué se omite una decisión de 22 organizaciones sociales, que es de no elevar la tarifa”.
El gobierno local elevó el boleto con base en un estudio de hace dos años de la Autoridad de Telecomunicaciones y Transportes (ATT) y en una encuesta aplicada a 2.500 personas, hace dos semanas. El resultado era que la población apoyaba el alza si es que mejoraba el servicio y se eliminaba el trameaje.