Una mujer falleció y 41 viviendas fueron afectadas al caer un alud de toneladas de residuos de explotación minera en el campamento minero de Huanuni (Oruro). Cinco casas quedaron prácticamente sepultadas y 60 familias fueron evacuadas por seguridad.

“Tomé de la mano a mi esposa, mis hijos y mis nietos ya habían logrado salir de la casa, pero no la pude sacar a ella y se lo tragó la carga. Fue una sorpresa porque el mineral ya estaba sobre nuestra casa”, narró a La Razón Beymar Prada, que perdió a su compañera de vida Rosa Donaire, de 54 años.

Según los vecinos, una fuerte granizada que cayó el sábado por la tarde remojó el desmonte ubicado por encima de las casas, en el barrio de Santa Elena, el siniestro los sorprendió por la noche.

La tragedia pudo ser mayor, pero muchos se habían ausentado a Oruro para ver la entrada. Los restos de la víctima eran velados ayer por los lugareños.

El alud, formado sobre todo por piedras, dañó 41 viviendas; además de las cinco que quedaron sepultadas, otras 20 revisten serios daños y sus propietarios lamentaron los destrozos de artículos como electrodomésticos y muebles de diverso tipo.

María Chávez, otra de las afectadas, relató que a las 18.00 comenzó a filtrar agua, “de repente una tremenda carga de piedras y barro entró con fuerza, nos ha sorprendido y no tuvimos tiempo para nada, solo de salir rápido”.

Cristóbal Arce, además de perder todos sus enseres, se quedó sin sus documentos. “La carga entró a mi casa y llenó desde el piso hasta el techo, lo enterró todo.

Yo estuve durmiendo y apenas escapé en calzoncillos”, relató. Algunos vecinos culpan a la empresa de haber aumentado el desmonte en el sector de la mina Patiño y no colocar un muro de contención.

El viceministro de Defensa Civil, Óscar Cabrera, que llegó al lugar con ayuda para los damnificados, informó que 60 familias fueron evacuadas a viviendas que se hallan a tres kilómetros de Huanuni. “Llevamos ayuda inmediata, es una tonelada de alimentos, enseres de cocina y kits de higiene personal, además de colchones para que pasen la noche en las viviendas donde se instalaron”, dijo.

La autoridad informó que soldados de la Segunda División del Ejército, policías, además de funcionarios de Defensa Civil de la regional de Oruro, coadyuvan en el rescate de los bienes de las familias damnificadas y en la limpieza.

“El panorama es desolador en el campamento, el lodo llegó hasta el centro de la localidad, las calles que bajan del cerro están totalmente anegadas y lo peor es ver cómo las casas están totalmente enterradas por las piedras. Muchas familias lo perdieron todo, otros rescatan lo que pueden con ayuda de efectivos de la Policía y los soldados”, manifestó.

El secretario general del Sindicato de Trabajadores Mineros de Huanuni, Javier Canchari, ratificó que son 60 las familias evacuadas a Viluyo (carretera Huanuni-Oruro) donde hay viviendas sin habitar, además que habilitarán ambientes del sindicato. “Lo poco que pudieron rescatar fue trasladado a ese lugar en volquetas de la empresa. En el lugar se les asegurará la alimentación, después veremos cómo solucionamos el tema de la vivienda”, señaló.

El sargento Jesús Paco, de la Unidad de Bomberos de la Policía de Oruro, advirtió que hay un riesgo en el sector de Duncan (parte alta), donde hay un río que podría causar daño si las lluvias siguen.

En el sector de la bocamina los trabajadores procedieron a limpiar el lodo para volver a trabajar.

En 4 días, las familias afectadas por lluvia suben de 16.000 a 17.000

En cuatro días, el número de familias afectadas en Bolivia por las intensas lluvias aumentó de 16.000 a 17.000, mientras que las riadas, deslizamiento de tierra y caída de rayo dejaron un saldo de 25 muertos, desde octubre de 2014 a la fecha, informó a medios estatales el viceministro de Defensa Civil, Óscar Cabrera.

“Hasta hace cuatro días estuvimos con 16.000 familias (damnificadas), ahora la cifra sube a 17.000 familias en todo el país”, indicó.

Especificó que 36 municipios emitieron sus declaratorias de emergencia para atender los casos de desborde de ríos que afectaron, en su mayoría, a los cultivos.

Advirtió a la población, a autoridades municipales y departamentales que las lluvias y tormentas eléctricas todavía serán intensas en todas las zonas de los valles, el norte de La Paz, norte de Santa Cruz, además de Beni y el trópico de Cochabamba.

Respecto a la situación en las otras regiones, indicó que se atiende la emergencia causada por el desborde del río Guadalquivir (Tarija), debido a que tres municipios (San Lorenzo, Entre Ríos y Uriondo) fueron afectados con la pérdida de viviendas y sembradíos de verduras y frutas.

En cuanto al norte del país, sostuvo que las familias que se vieron perjudicadas por la inundación del río Maniqui en Santa Rosa (Beni) fueron atendidas con víveres.
“La Fuerza Binacional está trabajando en la construcción de defensivos para evitar que el agua llegue a la población. Además se envió desde La Paz ayuda humanitaria, alimentos y enseres para los afectados”, dijo.