La abogada Paola Barriga dijo ayer que gestiona ante el Colegio de Enfermeras y el Hospital del Niño la licencia indefinida sin goce de haberes de su defendida Isabel Coro, de 62 años, con detención domiciliaria desde hace más de tres meses acusada por el delito de encubrimiento de infanticidio en el caso del bebé Alexander.

“No vamos a descansar, porque nos indigna que personas como Lola R. (enfermera del Hogar Virgen de Fátima, donde presuntamente se perpetró la violación del lactante de ocho meses) que se benefició con medidas sustitutivas esté trabajando”, insistió la defensora, quien espera que con esta solicitud el juez modifique la detención domiciliaria.

Según Barriga, Coro no puede salir de su casa, vive de lo que le dan sus hermanos, debe atender a una hija enferma y a su madre de 98 años.

Revelación. Por otro lado, tras el anuncio de la Fiscalía de la aparición de una nueva víctima de Jhery F., de 34 años, médico del albergue y detenido en San Pedro como principal sospechoso de la violación de Alexander, su abogado Freddy Velásquez precisó que la víctima tiene ahora 26 años y que el supuesto delito se habría cometido hace 19 años.

“Si existe otra denuncia que abran otra causa, pero nada tiene que ver en éste”, indicó en declaraciones a Erbol.