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Infanticida boliviana: ‘Lo hice para que no sufran’

Rina M., la boliviana acusada de asesinar a sus dos hijos en la ciudad española de Barcelona dos semanas antes de su desahucio (desalojo de una vivienda por falta de pago del alquiler), aseguró ayer en el juicio que lo hizo para evitar que “sufrieran más”.

Un jurado popular juzga desde el lunes a la presunta infanticida, para quien la Fiscalía pide una pena de 40 años de cárcel —con un cumplimiento máximo de 25— por asesinar a sus dos hijos de 11 y 9 años, el 7 de abril de 2013, ahogándolos en la bañera tras aturdirlos con barbitúricos.

Junto a la Fiscalía, ejerce la acusación particular contra Rina M. su propio esposo, quien —según la procesada— la había abandonado a ella y a sus hijos, sin pasarle manutención alguna y desentendiéndose del desahucio que se avecinaba, previsto para el 24 de abril de 2013.

La acusada reconoció los hechos y confesó que después tomó una cantidad que no concretó de esos barbitúricos para suicidarse y escribió dos cartas, a su hermano y a una amiga, en las que afirmaba que se sentía agotada y solo quería “dormir”. Se confesó abandonada por su esposo desde 2012, víctima de malos tratos, en el paro (desempleada) y sin “papeles”.

“Mis hijos solo me tenían a mí. Y yo a ellos. Siempre fue así”, lamentó Rina M., quien evocó las dificultades que atravesó desde que llegó a España en 2009 e insistió en que se hizo cargo “totalmente” de su familia, incluso durante el año en que estuvo tratándose de un cáncer en la cadera.

La acusada, para quien su defensa pide la absolución, reconoció que sentía “dependencia emocional” hacia su pareja y descartó regresar a Bolivia porque su hija mayor está por ser operada en Barcelona, en una intervención ella no habría podido costear.

Cae sujeto por homicidio de niño

El delito fue cometido el 22 de enero; su madre   lo denunció el viernes 6

Daymira Barriga – La Paz

La madre de Emanuel Colque Rojas, de dos años, y su enamorado, cuya identidad no fue proporcionada, fueron arrestados el domingo en Sacaba, Cochabamba. Ella es investigada por complicidad y él por infanticidio.

El suceso ocurrió en el municipio de Pucara el 22 de enero. Como el pequeño no tenía lesiones externas, ni sangrado, la mujer, de 26 años, declaró que murió por causas naturales y lo enterró en el cementerio, reportó el diario cochabambino Opinión.

Al día siguiente, el homicida, de 33 años, la mujer y el hermano de la víctima, de cinco años, viajaron a Yacuiba, Tarija. Allí tras una convivencia de cuatro días el sujeto la abandonó. La mujer retornó a Cochabamba y el viernes 6 de marzo denunció el infanticidio.

El hermano mayor contó a los investigadores de la fuerza anticrimen que el novio de su madre arrojó a Emanuel a la cama porque no dejaba de llorar. El padre del menor reside en el Chapare.

La mañana de ayer tenía que practicarse la necropsia para establecer las causas del fallecimiento del infante.