La Policía detuvo el domingo a Boris F. Q. de 24 años, identificado como el principal sospecho de la muerte de dos choferes de taxi del sindicato ’29 de Mayo’ la pasada semana. El director regional de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), Félix Rocha, dijo que el acusado estaba «resentido» con los conductores porque estos se rehusaron a transportarlo. La defensa alegó problemas mentales.
Ambos taxistas fallecieron por impacto de bala calibre 22 entre el 8 y 9 de abril. La Policía halló en el domicilio del sospecho 22 cartuchos de este tipo de balas y nueve casquillos. El método identikit elaborado gracias a testimonios de testigos permitió a la Policía identificar al presunto autor.
Durante la mañana del domingo 12 de abril, Boris F. Q. se encontraba en plena discusión con sus vecinos en la zona Tejada Triangular y fue aprehendido cuando amenazaba con dispararle a uno de ellos. El motivo, según el fiscal Harold Jarandilla, era un lote de terreno.
La abogada de Boris F. Q., Mónica Irusta, sostuvo que su defendido no «está en sus cinco sentidos» y que es «netamente manipulable».
Según la versión de la abogada, el joven habría sido manipulado por dos vecinos suyos que le enseñaron a disparar para que matara a su padre. La finalidad era quedarse con una casa valorada en 50 mil dólares. Uno de esos vecinos era el que este domingo Boris amenazó en el momento de su aprehensión.
Irusta aseguró que Boris no cometió ambos asesinatos pero sí estuvo presente durante los hechos.