Sociedad

Thursday 25 Apr 2024 | Actualizado a 09:55 AM

El drama de Rosa devela otros casos de abusos

El caso de Rosa, la joven paceña vejada y torturada por una pareja de bolivianos en Buenos Aires (Argentina), no es el único, otros similares fueron develados a través de testimonios relatados a la red de radios de la capital y la provincia del vecino país.

/ 27 de abril de 2015 / 05:27

El caso de Rosa, la joven paceña vejada y torturada por una pareja de bolivianos en Buenos Aires (Argentina), no es el único, otros similares fueron develados a través de testimonios relatados a la red de radios de la capital y la provincia del vecino país.

“Queremos que sepan que hay más violadores y bestias en los talleres, por favor den a conocer mi llamado. Mi esposa tenía 14 años cuando la trajeron. Ahora no puede hablar, sigue llorando”, relató por teléfono la pareja de una joven que vive en Buenos Aires.

En medio de la campaña radial realizada para recaudar dinero para el tratamiento médico de Rosa se registró un llamado, pero solo se escuchó el llanto de la mujer. El esposo contó que su pareja, hoy de 26 años, fue trasladada a Buenos Aires, desde la provincia Omasuyos (La Paz), para trabajar de niñera.

“Cuando llegó el tallerista, el hijo y el yerno abusaron de ella. Le hacían trabajar de cocinera y ayudante de taller. Le amenazaban todo el tiempo, hasta que llamó a escondidas a sus hermanos, pero cuando reclamaron, recibieron amenazas”, narró.

Libre. Después de un año de reclamos, la joven quedó libre; para entonces tenía 20 años. Ése fue uno de los relatos difundidos por la cadena de radios entre el viernes y el sábado.

Muchas personas llegaron hasta las emisoras para dar testimonio de haber conocido casos similares al de Rosa, de haber perdido a familiares después de migrar de Bolivia en busca de trabajo. Otras, en medio del llanto se presentaban como víctimas de trata que habían logrado escapar.

Rosa, oriunda de Collana (La Paz), fue llevada a Buenos Aires hace cinco años por una pareja boliviana, ahí fue víctima de vejaciones por sus tratantes, quienes hoy están detenidos con fines investigativos. Fue rescatada el 17 de abril.

Su madre de 53 años y su hermano viajaron a la capital argentina. La campaña radial “Todos contra la trata. Todos por Rosita” se activó para juntar dinero y brindarles ayuda económica a fin de costear los gastos médicos.

La suma que se logró recaudar en los dos días de campaña fue de 250.000 pesos argentinos ($us 19.230). Ese es el monto que Rosa debería haber cobrado por los cinco años de trabajo en el taller textil, de propiedad de bolivianos.

Los radialistas que hicieron el enlace indicaron que la comunidad boliviana recaudó ese monto para que ella no se preocupe por trabajar, sino que se concentre en recuperarse del trauma que pasó.

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Ser periodista boliviana en Argentina

Los grandes medios invisibilizan con frecuencia a la colectividad boliviana.

/ 16 de julio de 2017 / 04:00

Mi amor por el periodismo no migró conmigo. Llegué a Argentina a los 17 años. Viví en Jujuy, lugar donde nació mi amado hijo en 1987. Cuando él cumplió nueve meses nos mudamos a “la capital”, porque decían que ahí había más trabajo y menos burocracia. Aunque a veces la realidad en la city porteña es muy distinta a la que uno imagina.

La Universidad de Buenos Aires (UBA) daba —y sigue dando— unos cursos de orientación vocacional y por ese entonces íbamos obligados a hacer el curso. Cuando vi el resultado, quedé sorprendida: “Usted tiene afinidad para las ciencias sociales o comunicación social”. Recuerdo que dudé de la idoneidad de los responsables del curso porque ni por asomo estaba en mis planes el ser periodista. Mi sueño era ser traductora de idiomas; estaba convencida de que el saber inglés arreglaría mi vida, pero trabajé en todos los oficios que uno se pueda imaginar, hasta que otra vez la realidad torcía mi camino.

Hacia finales de 1998, y toda esa época, un peso argentino equivalía a un dólar gracias a la Ley 23928 de Convertibilidad del Austral. Esa “bonanza económica” atrajo más migración boliviana pero comenzaron los casos de trata y tráfico de personas a partir de gestores que estafaban con los trámites de DNI y se daba el abuso policial, laboral, discriminación, xenofobia; se dieron asesinatos de compatriotas que aún están impunes. Ante hechos como esos no se puede ser indiferente, pues para entonces ya estaba colaborando en diversos programas radiales y a partir de ese momento me dediqué tiempo completo a la cobertura de hechos relacionados con la colectividad.

El ejercicio de la profesión en la Argentina se encuentra regulada por la Ley 12908, conocida como Estatuto del Periodista. El ejercicio legal de la actividad no establece requisitos académicos ni de colegiación para ser considerado periodista profesional. Esta parte de la norma sigue siendo motivo de debate. Trabajar sin pasar por la academia no implica desconocer lo importante que es adquirir el marco teórico. La pasión por el oficio no es suficiente pues se necesita capacitación permanente. Por cierto, la Unión de Trabajadores de Prensa de Buenos Aires (UTPBA) es el sindicato que más colegas migrantes agrupa y da talleres gratuitos de capacitación.

El trabajo cotidiano de los periodistas fuera de las fronteras de Bolivia está marcado por una agenda informativa binacional.

Por ejemplo, la última semana de junio de este año será recordada por el caso de los nueve detenidos en Chile y su posterior liberación y “declaración de mártires”, pero además de ese tema también hablamos del operativo de allanamiento en la Salada, el mayor mercado de Buenos Aires en el que trabajan cientos de bolivianos.

Como resultado de esa acción, Jorge Castillo, el administrador de la Feria Punta Mogotes, quedó detenido acusado de asociación ilícita. Pero, lo que no contaron todos los medios fue que una gran cantidad de feriantes compatriotas aplaudían los operativos, pero se quejaban porque nadie les daba una solución a la falta de trabajo por el cierre de esa feria.

En esos últimos días de junio, continuaba desaparecida Nadia Rojas, de 14 años, hija de una compatriota, y según se sospecha sería víctima de una red de trata de personas con fines de explotación sexual. El caso estuvo apenas un día en los noticieros.

Otro hecho ignorado por los medios fue el de Marlene Montenegro, paceña de 30 años, asesinada por delincuentes en su casa del barrio de la Villa 1-11.14. Para visibilizar el hecho, la familia de Marlene y de Nadia se unió y protestó en una avenida céntrica de Buenos Aires. Ese mismo día, más de 25 personas denunciaron, en una fiscalía porteña, que fueron estafados por el Fondo de Inversión Oshai y por distintas empresas piramidales, entre ellas Paydiamond y Bitcoin Cash. Se estima que hay más de un millar de personas damnificadas.

A fines de junio, finalizó la temporada teatral La balsa de la Ekeka, protagonizada por las compatriotas Olivia Torres y Berenice de la Cruz.

Y esa misma semana estuvo por Buenos Aires el ministro boliviano de Energía, Rafael Alarcón, quien se reunió con su par de Argentina, Juan José Aranguren. Hablaron sobre el proyecto de integración eléctrica Bolivia-Argentina y sobre los centros de medicina nuclear y radioterapia.

De este modo, aprovecho este espacio “binacional” para poner mi queja. No termino de entender a la representación diplomática de Bolivia en Argentina, porque todas las reuniones bilaterales las mantienen casi en secreto y nos terminamos enterando por el lado argentino. Y cuando se le consulta a la gente de prensa del ministerio de la Argentina, ellos responden: “Pregunte en su embajada, ellos tienen la información”. Hasta que algún colega solidario brinda datos y se puede armar la nota. Y esto no es de ahora sino que sucede con todas las gestiones. Parece que tienen la idea de que los compatriotas solo debemos enterarnos de temas relativos a temas políticos partidarios…

  • Lilia Camacho es periodista boliviana radicada en Argentina

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Luzmila Carpio cautiva a Buenos Aires

La artista pidió la libertad de los nueve presos en Chile. La gente parecía que detenía hasta su respiración para oír la canción Pachamama, con la que Carpio empezó el recital.

/ 22 de mayo de 2017 / 12:53

El Centro Cultural Néstor Kirchner eligió a Luzmila Carpio para abrir su ciclo de conciertos Latinoamérica. En 15 minutos se agotaron las reservas online para obtener las entradas. La cantante boliviana, que rindió tributo a Mercedes Sosa, pidió la liberación de los nueve detenidos en Chile.

Buenos Aires estaba nublado el sábado. Pero mucha gente ya se encontraba, desde las 18.00, en el salón central del Centro Cultural Néstor Kirchner (CCK). Algunos trataban de conseguir entradas y otros buscaban la fila para ingresar.

El público era casi 70% argentino y 30% boliviano. Una vez que se ingresó a la Sala Sinfónica Ballena Azul —única en Latinoamérica por su acústica y tercera en el ámbito mundial— se empezó a escuchar zampoñas y sicuris, interpretados por músicos y por parte de la audiencia, que tocaba y cantaba.

La gente parecía que detenía hasta su respiración para oír la canción Pachamama, con la que Carpio empezó el recital. A medida que pasaba el concierto se podían percibir sollozos de emoción. La artista rindió homenaje a su amiga Mercedes Sosa, fallecida en 2009, mostró el collar de plata que La Negra Sosa le regaló e interpretó un fragmento de Yo vengo a ofrecer mi corazón.

Al terminar la canción Presagio de los pájaros, se hizo el silencio y la cantante se dirigió a la audiencia: “Hermanos que estaban trabajando en la frontera con Chile han sido apresados. Pidamos que el hermano país de Chile obre con el corazón. No es justo que hagan eso, ¿no les parece?”. (22/05/2017)

Espere

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Luzmila Carpio cautiva a Buenos Aires

La artista pidió la libertad de los nueve presos en Chile. La gente parecía que detenía hasta su respiración para oír la canción Pachamama, con la que Carpio empezó el recital.

/ 22 de mayo de 2017 / 12:53

El Centro Cultural Néstor Kirchner eligió a Luzmila Carpio para abrir su ciclo de conciertos Latinoamérica. En 15 minutos se agotaron las reservas online para obtener las entradas. La cantante boliviana, que rindió tributo a Mercedes Sosa, pidió la liberación de los nueve detenidos en Chile.

Buenos Aires estaba nublado el sábado. Pero mucha gente ya se encontraba, desde las 18.00, en el salón central del Centro Cultural Néstor Kirchner (CCK). Algunos trataban de conseguir entradas y otros buscaban la fila para ingresar.

El público era casi 70% argentino y 30% boliviano. Una vez que se ingresó a la Sala Sinfónica Ballena Azul —única en Latinoamérica por su acústica y tercera en el ámbito mundial— se empezó a escuchar zampoñas y sicuris, interpretados por músicos y por parte de la audiencia, que tocaba y cantaba.

La gente parecía que detenía hasta su respiración para oír la canción Pachamama, con la que Carpio empezó el recital. A medida que pasaba el concierto se podían percibir sollozos de emoción. La artista rindió homenaje a su amiga Mercedes Sosa, fallecida en 2009, mostró el collar de plata que La Negra Sosa le regaló e interpretó un fragmento de Yo vengo a ofrecer mi corazón.

Al terminar la canción Presagio de los pájaros, se hizo el silencio y la cantante se dirigió a la audiencia: “Hermanos que estaban trabajando en la frontera con Chile han sido apresados. Pidamos que el hermano país de Chile obre con el corazón. No es justo que hagan eso, ¿no les parece?”. (22/05/2017)

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La falta de jurados caracterizó el referéndum en Buenos Aires

Solo fueron notificadas cerca del 50% de las personas elegidas para operativizar el proceso. En varios recintos se recurrió a los votantes para habilitar las mesas electorales

/ 22 de febrero de 2016 / 04:00

La jornada del referéndum constitucional en Buenos Aires se llevó a cabo en medio de un día soleado con casi 30°C. El acto de inicio fue en la populosa escuela N°3 Cristóbal Colón, de la zona de Lugano, el sur de la ciudad autónoma de Buenos Aires.

A diferencia de otros años, no hubo filas de gente esperando la apertura de mesas. Lo que sí se vio en muchos recintos fue a personas preguntando por su lugar de votación. De manera extraoficial y según los reporteros de la red de radios que cubrió el evento, solo estuvieron habilitadas el 95% de las mesas. El 5% se cerró por falta de jurados. Se calcula que solo el 50% de los jurados fueron notificados. Continuamente se observó y se escuchó que no había la cantidad de electores esperada.

Tal fue el caso del establecimiento de Lugano, que fue elegido por tener muchos estudiantes bolivianos. Esta escuela fue pionera en gestionar la integración de su alumnado extranjero a través de un diccionario de modismos bolivianos y argentinos creado por alumnos desde el kínder.

Unos 117.000 bolivianos fueron habilitados para votar en ese país que concentra la mayor cantidad de migrantes.

Una de las particularidades de ayer fue la reportería de las distintas emisoras dedicadas a la colectividad boliviana. Las radios se unieron para ampliar su cobertura en los 43 recintos electorales e informaron la ausencia de jurados y algunos inconvenientes en escuelas que abrieron tarde.

Durante la mañana de este domingo, el informe apuntó a la inasistencia. El dato de color fue la presencia de Braulia Mamani Apaza (85), quien como hace varios años, asiste junto a su familia y siempre insiste en ejercer el derecho al voto, cuenta su hija Juana con la voz entrecortada por la emoción.

Por otra parte, Silvana Yazbek, directora ejecutiva del Instituto de la Democracia y Elecciones-IDEMOEEl del Observatorio Electoral de la Defensoría del Pueblo de Argentina, en declaraciones a La Razón, anunció que se desplegó personal en todo el territorio argentino y que ha sido registrado y acreditado por el Órgano Electoral Plurinacional (OEP), Tribunal Supremo Electoral de Buenos Aires. En este sentido, destacó la apertura del organismo electoral boliviano para contemplar y autorizar la presencia de misiones en el exterior, algo novedoso en la región, según Yazbek.

Los veedores estuvieron en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Mendoza Capital, Córdoba Capital, San Salvador de Jujuy y Rosario, provincia de Santa Fe.

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La falta de jurados caracterizó el referéndum en Buenos Aires

Solo fueron notificadas cerca del 50% de las personas elegidas para operativizar el proceso. En varios recintos se recurrió a los votantes para habilitar las mesas electorales

/ 22 de febrero de 2016 / 04:00

La jornada del referéndum constitucional en Buenos Aires se llevó a cabo en medio de un día soleado con casi 30°C. El acto de inicio fue en la populosa escuela N°3 Cristóbal Colón, de la zona de Lugano, el sur de la ciudad autónoma de Buenos Aires.

A diferencia de otros años, no hubo filas de gente esperando la apertura de mesas. Lo que sí se vio en muchos recintos fue a personas preguntando por su lugar de votación. De manera extraoficial y según los reporteros de la red de radios que cubrió el evento, solo estuvieron habilitadas el 95% de las mesas. El 5% se cerró por falta de jurados. Se calcula que solo el 50% de los jurados fueron notificados. Continuamente se observó y se escuchó que no había la cantidad de electores esperada.

Tal fue el caso del establecimiento de Lugano, que fue elegido por tener muchos estudiantes bolivianos. Esta escuela fue pionera en gestionar la integración de su alumnado extranjero a través de un diccionario de modismos bolivianos y argentinos creado por alumnos desde el kínder.

Unos 117.000 bolivianos fueron habilitados para votar en ese país que concentra la mayor cantidad de migrantes.

Una de las particularidades de ayer fue la reportería de las distintas emisoras dedicadas a la colectividad boliviana. Las radios se unieron para ampliar su cobertura en los 43 recintos electorales e informaron la ausencia de jurados y algunos inconvenientes en escuelas que abrieron tarde.

Durante la mañana de este domingo, el informe apuntó a la inasistencia. El dato de color fue la presencia de Braulia Mamani Apaza (85), quien como hace varios años, asiste junto a su familia y siempre insiste en ejercer el derecho al voto, cuenta su hija Juana con la voz entrecortada por la emoción.

Por otra parte, Silvana Yazbek, directora ejecutiva del Instituto de la Democracia y Elecciones-IDEMOEEl del Observatorio Electoral de la Defensoría del Pueblo de Argentina, en declaraciones a La Razón, anunció que se desplegó personal en todo el territorio argentino y que ha sido registrado y acreditado por el Órgano Electoral Plurinacional (OEP), Tribunal Supremo Electoral de Buenos Aires. En este sentido, destacó la apertura del organismo electoral boliviano para contemplar y autorizar la presencia de misiones en el exterior, algo novedoso en la región, según Yazbek.

Los veedores estuvieron en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Mendoza Capital, Córdoba Capital, San Salvador de Jujuy y Rosario, provincia de Santa Fe.

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