El Órgano Ejecutivo garantizó que no expropiará áreas habitadas en la zona paceña de Mallasilla para construir el Centro de Investigación y Desarrollo en Tecnología Nuclear, el que aportará a la salud, industria y ciencia del país.
“No estamos hablando de expropiar viviendas en áreas habitadas”, dijo ayer la viceministra de Electricidad y Energías Alternativas, Hortensia Jiménez. Se prevé que el centro de unos $us 200 millones —que se construirá sobre una superficie de 20 hectáreas— comience a operar en 2019. El presupuesto para este año es de Bs 12 millones.
El complejo incluirá un Centro Nacional Ciclotrón-Radiofarmacia, que mejorará el diagnóstico y tratamiento del cáncer y otras patologías, además de fortalecer los centros de radioterapia de Bolivia; una Planta Multipropósito de Irradiación, para contribuir a la seguridad e inocuidad alimentaria y al incremento de la productividad agroindustrial; un Reactor Nuclear de Investigación de baja potencia, que contribuirá al desarrollo de la medicina, industria, ciencias ambientales, biológicas, físicas, químicas, petroquímicas, hidráulicas, geológicas y de materiales, entre otras; y un Laboratorio de Investigaciones Nuclear y Capacitación, que promoverá la formación teórica y práctica en las áreas de ciencias, ingeniería y tecnología nuclear con fines pacíficos.
De acuerdo con Jiménez, Bolivia es el único país en la región que no cuenta con un ciclotrón. Argentina y Brasil tienen cinco cada uno; México tres; Chile y Colombia dos, y Perú, Paraguay, Uruguay y Venezuela uno, todos ubicados en medio de las ciudades.
“Estamos con toda la predisposición, tenemos planificado todo un programa de información” para los vecinos de Mallasilla, sostuvo la autoridad, quien además insistió en la seguridad del proyecto.