Sujeto es enviado a prisión por feminicidio e infanticidio
Búsqueda. El cuerpo de la niña de siete meses está desaparecido
El juez Anticorrupción y Violencia contra la Mujer, Ricardo Pinto, determinó ayer la detención preventiva en el penal de Chonchocoro para Luis Morales, quien confesó haber asesinado a su expareja Sarah P. y a su hija de siete meses. El cuerpo de la infante aún no fue hallado.
“La decisión fue enviar a Chonchocoro, penal de máxima seguridad, al imputado por este hecho sangriento que enluta a la familia de la víctima, pero también que enluta a toda la sociedad boliviana”, afirmó Ricardo Pérez, abogado de la familia de Sarah P.
El lunes 5, Sarah Evelyn P., de 25 años, salió de su casa en la zona Villa Armonía de la ciudad de La Paz rumbo al domicilio de su expareja, Luis Morales, en el barrio Santiago II de El Alto. Debían conversar sobre la situación de paternidad de la infante. La madre acudió al encuentro con la pequeña, pero nunca retornó.
Según el testimonio de familiares y amigos de Sarah, Morales salía con otras dos mujeres, quienes se encuentran embarazadas. Además, denunciaron que él no quería hacerse cargo de la niña. “Mi hija inició un proceso o demanda para que él le pase pensiones”, explicó Benito P., el padre.
Ataque. De acuerdo con los testimonios, ese día ambos discutieron y no llegaron a ningún acuerdo sobre el tema de pensiones. Ella decidió abandonar el lugar, y Morales la atacó. Se sospecha que Sarah se defendió, ya que el acusado presenta arañazos en el rostro. Según las versiones recopiladas por la Policía, el imputado usó un cinturón de cuero para asfixiar a su expareja.
Esa misma jornada, en la zona Santa Rosa de El Alto, una mujer fue a botar basura y observó que un cuerpo yacía entre los desechos. Llamó a la Policía y se descubrió que se trataba de Sarah. En ese lugar no se hallaba el cuerpo de la niña de siete meses.
La Policía aprehendió a Luis Morales el viernes por la noche y fue llevado a celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC). Luego pasó a celdas judiciales, hasta la audiencia de medidas cautelares. Ayer, al mediodía, se determinó su traslado al penal de Chonchocoro.
Según las declaraciones del imputado, la menor también fue victimada y el cuerpo trasladado en una mochila. No obstante, en su primera versión ante la Policía dijo que la dejó en la cama y no supo más de ella.
Los investigadores creen que la madre del acusado está involucrada y se planteó la posibilidad de que ella tenga a la pequeña en su casa. “Tenemos esas versiones, pero nada nos da la certeza de ello, queremos saber dónde está la niña, necesita a su familia, alimentos, ropa”, dijo una de las amigas de Sarah.
La Policía y los familiares de Sarah no pierden la esperanza de encontrar a la infante. Ayer, en la audiencia de medidas cautelares, el sujeto confesó haberla dejado, dentro de una mochila, en un contenedor de basura de la avenida Las Américas, en Villa Fátima, luego de haberla asfixiado.
De acuerdo con el fiscal Nelson Terrazas, a partir del fallo del juez se cuentan seis meses para la etapa investigativa a la que ingresó el caso; en ésta, la Policía y el Ministerio Público deben obtener todos los elementos probatorios en contra del acusado. “No existe solicitud de proceso abreviado por parte del imputado, quien prefirió callar y solo decir que es el autor; confesó haber matado a la señora Sarah y a su bebé”.
Un pedido de Justicia
Doloroso
Candy C., madre de Sarah y abuela de la menor de siete meses, dijo que luchará hasta el final para lograr justicia y pidió que las autoridades vean el caso con humanidad y se basen en la confesión y los hechos que causaron mucho dolor a su familia.