Un incendio destruyó una fábrica de sombreros ubicada en la calle Girasoles de la zona Norte de Cochabamba. El siniestro dejó dos personas heridas, informó el comandante departamental de la Policía, Luis Aguilar, según la agencia ABI.

“Se produjo el incendio en la fábrica de sombreros de industria nacional Bolivia, cerca de las 09.00 (de ayer) y se reportó también dos personas heridas”, indicó la autoridad.

Señaló que los lesionados fueron identificados como Harold Terceros (17) y Rogelio Cortez Montaño (37), quienes quedaron con quemaduras de primer y segundo grado en distintas partes del cuerpo.

El comandante manifestó que los datos preliminares establecieron que el siniestro comenzó en un depósito de clefa, por lo que se investigará el hecho.

Cinco rutas turísticas definidas por la Alcaldía de El Alto tendrán el apoyo de micro y pequeñas empresas (mypes), que ofrecerán una diversidad de productos a los visitantes.

La actividad será implementada por la Unidad Municipal de Turismo, informó la alcaldesa Soledad Chapetón, quien agregó que se organizó la primera Rueda de Negocios Turísticos de El Alto, con la participación de 35 empresas del rubro. “Esto para que sean ellas mismas las que puedan ofrecer estas visitas a los turistas”.

Los atractivos escogidos son el turismo esotérico en las apachetas, el city tour con rapel en el Faro Murillo, el recorrido por la feria 16 de Julio, los atractivos arquitectónicos (“cholets”) y la Ruta Qhutaña.

Organizaciones vecinales de El Alto solicitaron al Gobierno que el Centro de Investigación y Desarrollo en Tecnología Nuclear (Cideten) sea construido en esa ciudad.

La concejal y presidenta de la comisión de Planificación y Desarrollo Económico del Concejo Municipal, Wilma Alanoca, dijo que esta iniciativa nace de los vecinos de El Alto.

“Todo se puede dar, pero siempre sujeto a revisión, información y difusión con las autoridades, y sobre todo con los vecinos”, afirmó la representante.

Alanoca explicó que se conoció que el Gobierno central recibió una propuesta de los vecinos que ofrecen espacios para la construcción de este centro.

“Muchos detalles no podemos dar hasta estar con la información adecuada y no causar un efecto negativo del tema”, señaló.

El 4 de octubre, la viceministra de Electricidad y Energías Alternativas, Hortensia Jiménez, informó que el Órgano Ejecutivo tomó la decisión de no construir el Cideten en el sector de Mallasilla en La Paz debido a la oposición de los vecinos, quienes creen que la radioactividad afectará su salud.

La autoridad de Gobierno negó que el proyecto produzca este efecto y aseguró que se busca terrenos en otras ciudades.

La Ley Municipal de Fortalecimiento a la Seguridad Ciudadana podría aplicarse desde diciembre. Esta norma pretende sancionar a los dueños de inmuebles que alquilen sus ambientes a bares clandestinos.

El concejal y presidente de la Comisión Técnica y Desconcentración, Javier Tarqui, explicó que por ahora esta propuesta de ley se halla en etapa de difusión con las organizaciones sociales. “Creemos que este proceso será hasta el 20 de octubre, luego el Concejo decidirá si se aprueba. Después, el Ejecutivo debe elaborar su reglamentación, por lo que estimamos tenerla en diciembre”, precisó.

La necesidad de multar a los propietarios de los domicilios se debe a la persistencia de este tipo de locales, que pese a que son clausurados, vuelven a abrir en otra vivienda. Incluso, el dueño de la casa donde había un boliche, cuando éste es cerrado, alquila el espacio a otra cantina.

Tarqui explicó que además se obligará al reempadronamiento de este tipo de negocios. “El 80% de los negocios de expendio de bebidas alcohólicas es ilegal y solo el 20% tiene la autorización respectiva”, manifestó según sus propios datos.

Datos del gobierno local a 2013 dan cuenta de que en El Alto solo 48 negocios en los que se venden bebidas alcohólicas, entre whiskerías, bares, cantinas, moteles, cabarets y licorerías, funcionan con autorización edil.

Por ejemplo, las licorerías autorizadas en la Ceja se hallan entre las calles 1 y 7 de las avenidas Jorge Carrasco, Franco Valle y Raúl Salmón de la zona 12 de Octubre, además de la avenida Antofagasta de Villa Dolores. Pero en esta área se ven unos 90 negocios relacionados con la venta de licores, según comprobó La Razón. También existen tiendas de venta de alcohol en las avenidas Julio César Valdez, la Plaza de la Cruz, el cruce a Villa Adela y esta misma zona.

La Alcaldía de El Alto tiene registradas solo 23 licorerías como legales, el 90% de ellas está en la Ceja.

Otra iniciativa de esta ley municipal pretende donar los bienes incautados en estos negocios ilegales a unidades educativas y centros culturales, para evitar que éstos se deterioren en un plazo de 15 días.

Habrá control en las canchas

La venta y consumo de bebidas alcohólicas será controlada en los campos deportivos y sus alrededores.

La directora municipal de Deportes, Vanesa Illanes, explicó que en al menos 300 metros a la redonda, donde exista una cancha, se prohibirá la venta de cualquier tipo de bebida.

“Queremos fomentar la actividad sana del deporte y que éste se relacione con el objetivo real que significa participar en un torneo, campeonato o encuentro, que incluso puede ser hasta familiar”, dijo.

En El Alto existen 1.069 escenarios deportivos, de los cuales solo seis se encuentran bajo tuición de la Alcaldía. “Al principio pensamos que había convenios firmados con autoridades de la anterior gestión edil, pero no hay documento alguno que diga que ellos (particulares) deben administrarlos”.

Illanes dijo que lo peor de todo este problema es que además se venden bebidas adulteradas, pues los mismos empleados o dueños de negocios reciclan botellas y las rellenan con la mezcla preparada por ellos. Las ofrecen a precios bajos, desde Bs 15 hasta Bs 20 por unidad.

El plan de seguridad de la Alcaldía también pretende aplicar el programa Escuelas Seguras, que se refiere a la prevención dentro de las unidades educativas y el trabajo coordinado con los padres.

La enseñanza de escuelas de gastronomía en El Alto tiene distintos enfoques. Se logró identificar cuatro centros educativos: dos en el centro, uno en Ciudad Satélite y los ocho con los que cuenta Manq’a.

Uno de ellos, ubicado en el centro de El Alto, enseña con un enfoque más teórico, 40%, de acuerdo con un alumno que accedió a relatar el currículo. Manifestó que dentro de esa teoría incluso se enseña matemática.

El segundo centro separa la enseñanza en módulos, entre ellos está la cocina nacional, internacional,  vegetariana, italiana, entre otras. Cada una de estas modalidades tiene un mismo costo para el estudiante, pero varía el tiempo de duración de cada curso.

Del tercer centro no se obtuvo información; ninguno de estos tres ofrece comida en restaurantes hecha por su alumnos, excepto Manq’a.

Estudiantes afirmaron que optan por cursos rápidos con el fin de conseguir posibilidades de trabajo que sean inmediatas.

Julián Mamani, vecino de Franz Tamayo ‘Es higiénico, confiable y hay comida muy nutritiva’

Es la primera vez que vengo a este restaurante, pero se ha ganado mi confianza porque en otros te atienden muy mal, es antihigiénico y tardan en servirte cada plato.

En cambio aquí (en el restaurante de Manq’a de la zona Franz Tamayo) todo está bien y me gustó lo que me dijeron los jóvenes que me atendieron, que la comida que ofrecen es nutritiva y seleccionada.

Yo creo que en esta ciudad (El Alto) es muy difícil ubicar un lugar donde haya buena comida, no es   que no haya, pero son muy pocos.

Las personas de la tercera edad y los niños merecen que hayan lugares parecidos porque a veces la comida nos cae mal por la grasa que tienen o el condimento exagerado, así que ésta es una buena iniciativa.

Ana Santander, docente de Intervida: ‘Nunca vi algo similar en otras zonas de esta ciudad’

La iniciativa es plausible, creo que hay mucho que rescatar. Como dicen, de lo bueno debemos aprender e incluso debemos mejorarlo, tratar de ser mucho más.

Hemos conversado con los responsables de este lugar y nos dimos cuenta de que la comida que utilizan y la preparación tiene mucho detalle y enfoque en lo nutricional.

Nunca antes he visto un lugar similar en la ciudad, es decir que enseñen y que ese aprendizaje quede de forma inmediata plasmada en la práctica de los estudiantes de gastronomía. Me llamó la atención que haya incluso un restaurante, que creo se irá llenando poco a poco porque hay muchos aspectos para escogerlo.

Claudia Benavídez Zegarra, estudiante de Manq’a: ‘Me interesó este centro porque es saludable’

Siempre me interesó la idea de poder  aprender a cocinar, mi mamá lo hace para sostener a la familia y siempre me dije que la iba a ayudar y ahora estoy en el proceso de aprender.

Fui a unos dos centros en esta ciudad, pero éste hace la diferencia porque hay más práctica, menos teoría y ante todo lo que se enseña es a comer de forma saludable.

La comida rápida es lo que caracteriza a El Alto, pero no es siempre nutritiva, pues utilizan el mismo aceite, no lavan bien los utensilios, las ollas y otros artículos. Todo eso lo aprendemos acá y sabemos que es parte de la buena cocina, de la buena alimentación y costumbre que debería replicarse a todos los hogares.

Miriam Tórrez, estudiante de cocina: ‘Quiero aprender a cocinar por mi familia

Quiero aprender a cocinar por mi familia para brindarle platos variados y  apoyar a la nutrición de todos, nos  dimos cuenta de que no comemos bien pese a que hay las posibilidades de hacerlo.

En casa la comida es muy repetitiva: papa, chuño, fideo, arroz. Ahora veo que se puede elaborar una gran variedad de platos.

Otra de las razones por las que decidí ingresar es para aprender y luego ponerlo en la práctica, conseguir tal vez un trabajo o abrir más adelante mi propio restaurante.

Creo que estas enseñanzas deberían estar insertas en el colegio porque es parte de nuestros derechos comer y alimentarnos, pero no dicen cómo.