Mejora la salud del osezno Ajayu, apaleado por sus agresores hace dos semanas. Ahora prueba alimentos y acepta las caricias de las personas. Un informe preliminar señala que los atacantes son de la comunidad Cochimita. “Mejoró bastante, come alimentos sólidos, plátano, papaya, pan integral, y poco a poco recupera la facilidad de masticar”, informó la administradora del zoológico Vesty Pakos de Mallasa, Andrea Morales.
El osezno fue rescatado el 25 de enero de unos comunarios que lo golpearon con palos, causándole lesiones en la cabeza y en el ojo derecho. El 27 fue trasladado al zoológico de Mallasa para ser atendido. En los primeros días, el jucumari estaba susceptible a toda presencia de personas.
“Al parecer, el osito estaba en cautiverio porque no dejaba que nadie se le acerque; ahora que ya perdió el miedo, al parecer ya recibe caricias”, manifestó. A causa de la agresión el osezno perdió el ojo derecho y se espera en estos días estudios en el ojo izquierdo para una posible intervención, añadió Morales.
Demanda. Según el informe preliminar de una inspección realizada por la Secretaría de la Madre Tierra de la Gobernación de Cochabamba, la comunidad donde ocurrió el hecho fue Cochimita y no así K’omer Khocha. “La zona es bastante urbanizada, con campos de cultivo y perros, está muy alejada del hábitat natural de 10 a 15 kilómetros; hay la posibilidad de que hubiera llegado por las quebradas”, estimó Sidar Aguayo, responsable del Proyecto de Biodiversidad (Probio) de la Gobernación.
Esta información, sumada al informe de la Alcaldía de Tiraque (Cochabamba), será entregada al Ministerio Público para iniciar la demanda legal, aseguró. Morales reiteró que no hay fecha para el traslado del osezno al refugio de animales Senda Verde.