La renuncia irrevocable de Esteban Toco, el cuestionado administrador de la CNS de Oruro, puso fin a cinco días de huelga de hambre de los salubristas. La aseguradora de salud posesionó a un administrador interino por 90 días.
El gerente general de la Caja Nacional de Salud (CNS) de Oruro, Mario Aramayo, posesionó a Jacinto Torrelio como el nuevo administrador. “La gerencia nacional va a estar dispuesta al diálogo para lograr posiciones consensuadas y en los próximos 90 días se lanzará la convocatoria para institucionalizar todos los cargos de la Caja”, dijo Aramayo.
Los dos piquetes de huelga de hambre, en los que ayunaban médicos, enfermeras y administrativos, fueron levantados en medio de discursos de advertencia de no tocar más la aseguradora de salud de Oruro, aplausos, estribillos contra los nombramientos políticos y la entonación del Himno Nacional.
El sector comenzó las medidas de presión el lunes en demanda de la renuncia de Toco, a quien acusaron de mala administración y manejo. El conflicto generó fricciones entre huelguistas y mineros de Huanuni, quienes se pusieron a favor de Toco. También hubo intimidación a periodistas por parte de los mineros en una conferencia de prensa, por las preguntas que se formulaban.
A la posesión asistió Guido Mitma, ejecutivo de la Central Obrera Boliviana, quien resaltó que el nuevo administrador tiene la misión de lograr una mejor atención en la Caja y la gestión de medicamentos.