La Alcaldía paceña refaccionó más de 20 piletas públicas del Cementerio General reciclando el mármol de las lápidas abandonadas, informó el administrador del camposanto, Ariel Conitzer. El proyecto de reciclaje se realiza desde 2014.
“Este año hemos dado un pequeño giro más, en vez de utilizar las placas del lado posterior donde no tenía el nombre, ahora las utilizamos por el frente, dejando los nombres a la vista sin cortarlos ni borrarlos para rendirles un homenaje a los fallecidos que estuvieron en el cementerio y para darle una textura a las piletas”, refirió Conitzer.
En los últimos meses, la Alcaldía realizó las tareas de limpieza y varios trabajos de mantenimiento del lugar con miras a la celebración de de Todos Santos y de las Ñatitas.
“Este año hemos refaccionado ocho piletas (…), estas piletas las hemos ubicado en la parte del acceso de la puerta nueve (avenida Ente Ríos) porque al haberse abierto esta nueva puerta se ha creado un nuevo nodo que jala parte importante de movimiento de gente”, explicó la autoridad edil.
Agregó que las piletas refaccionadas anteriormente tenían una forma de pozo, lo que imposibilitaba recibir el agua en los floreros, pero ahora tienen una plataforma plana.
“Se ha rediseñado las piletas dándole una plataforma y esta plataforma está revestido con mármol”, dijo Conitzer. En el camposanto hay 92 piletas.
Datos históricos
En 1831, el Mariscal Andrés de Santa Cruz hizo construir el actual Cementerio General en el popular barrio de Callampaya, al estilo de las necrópolis europeas. En sus primeros años fue denominado El Panteón.
La idea de la amplia portada de piedra de granito de 14 metros nació del propio Mariscal que buscaba simbolizar de manera casi mística, una entrada al reino del más allá. También mandó a construir una capilla en medio, abriendo así la posibilidad de efectuar ceremonias de culto religioso.