Los montañistas escalan de noche al Huayna Potosí debido a las altas temperaturas
Una de las cholitas escaladoras explicó que la temperatura subió a tal punto que tuvo que cambiar su vestimenta. El deshielo es un asunto que preocupa a quienes hacen constantes recorridos a la zona.

El cambio climático afecta a los escaladores. Los trepadores que hacen su recorridido al Huayna Potosí antes partían a su aventura a las 06.00, pero por el aumento de la temperatura ahora lo hacen a las 00.00 horas, informó Eulario Gonzales, presidente de la Asociación de Andina de Promotores de Turismo en Aventura y Montaña (AAPTAM).
“Antes partíamos a la cumbre a las seis de la mañana; ahora, como el calor es insoportable y la nieve lastima más nuestra piel, partimos a las 12.00 de la noche para llegar al amanecer. Después, durante el día bajamos rápido porque debe hacer unos 20 grados de temperatura al mediodía. Además, hay muchas grietas y debemos tener más cuidado”, contó, según una nota informativa del Concejo Municipal de La Paz.
Gonzales, que tiene más de 30 años como guía de montaña, explicó que jamás había experimentado las altas temperaturas en su ascensión al Huayna Potosí, como ocurrió en este año.
“Los glaciares están retrocediendo a un ritmo muy acelerado. Entre las cuatro y cinco de la tarde cae cualquier cantidad de agua que luego se va hacia los Yungas”, contó Gonzales. Ese fenómeno se puede escuchar con el correr del agua, que baja en altas cantidades todos los días.
“Los glaciares están retrocediendo a un ritmo muy acelerado. Entre las cuatro y cinco de la tarde cae cualquier cantidad de agua que luego se va hacia los Yungas”, precisó.
Para corroborar su afirmación, el montañista mostró un video captado con su celular el último fin de semana en el Huayna Potosí, en el cual se ve agua cristalina descendiendo en grandes cantidades por las rocas del macizo, a una altitud de 6.088 metros sobre el nivel del mar.
Lidia Huayllas es miembro del grupo de Cholitas Escaladoras de la organización. Al igual que Gonzales, su esposo, dice que siente los embates del clima cada vez que tiene que escalar cargando en la espalda los alimentos con los que prepara diferentes platillos para los turistas que deciden escalar el Huayna Potosí u otro glaciar. Incluso más, pues por encima del buzo térmico propio de los andinistas lleva enaguas y unas pesadas polleras.
“Grave es el calor. Antes yo llevaba cuatro enaguas debajo de mi pollera; ahora apenas aguanto dos más mi pollera y mi buzo”, contó.
En julio pasado, la concejala Beatriz Álvarez (Sol.bo) se sumó al grupo de cholitas escaladoras y ascendió hasta 4.900 metros del Huayna Potosí. Entonces, ella también constató las altas temperaturas del mediodía, en pleno invierno.
“A medida que iba escalando he sentido mucho calor, tenía ganas de quitarme todas las prendas que me había puesto encima, pensando que haría mucho frío”, recuerda la legisladora.
En criterio de la concejala, urge tomar medidas para preservar los glaciares, pues ellos no sólo tienen que ver directamente con el equilibrio de nuestros ecosistemas, sino también que constituyen un patrimonio natural de todos los bolivianos y, de manera particular, de los paceños.
“Los efectos del cambio climático nos están afectando de manera severa, ahora mismo los paceños estamos sufriendo la escasez de agua, para lo cual no estábamos preparados. Es necesario tomar medidas de mitigación y adaptación al cambio climático; es necesario proteger nuestras fuentes de agua, glaciares, achachilas; también nuestros lagos, especialmente el Titicaca, que los empresarios mineros incorporen sistemas de tratamiento de metales pesados”, subraya la autoridad.
De acuerdo con los montañistas de la AAPTAM, otro fenómeno muy atípico que actualmente observan en los glaciares es la lluvia. “Antes no veía llover en la cumbre, solo nevaba; ahora llueve y la temperatura ha aumentado harto. De 15 grados bajo cero que solíamos tener arriba (en la cima) ahora debe hacer cero grados no más”, sostiene Eulalio, un asiduo visitante del Huayna Potosí, Illimani, Mururata y otros nevados de La Paz.