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Navarro niega actividad minera en el Illimani y denuncia confabulación de la oposición

El ministro de Minería, César Navarro, ratificó el domingo que no existe actividad minera en faldas del Illimani y una posible contaminación del agua que fluye hacia La Paz, como denunció la oposición, y reveló una confabulación que no solo afecta al Gobierno sino ahuyenta capitales privados para la minería.

En una entrevista en el Programa «El pueblo es noticia», que se difunde por los medios estatales, Navarro mostró mapas y estudios avalados por el director del Servicio Geológico Minero (SERGEOMIN), Roberto Pérez, para ratificar que no existe ninguna actividad minera, a contramano de una publicación en la que se asegura que empresarios chinos se adjudicaron 32.000 hectáreas en ese nevado, símbolo de La Paz.

«Es una campaña negativa, no contra el Gobierno, sino contra el país», remarcó al recordar que constitucionalmente no está prohibido capitales privadas en la explotación minera o en cualquier otra actividad económica, pero en apego a las normas vigentes que establecen que primero se debe conformar una empresa boliviana, como manda también el Código Minero.

El Ministro de Minería recordó que las concesiones mineras no son una novedad porque se otorgaron en todas las épocas, antes y después de la revolución del 52, desde la fundación del país, tomando en cuenta que la actividad minera ha sido siempre una de las principales actividades económicas.

No obstante, aclaró que las concesiones mineras antes de 2006 otorgaban derecho propietario amplio, que incluso establecía la herencia de esos predios, situación que con la nueva Constitución ha cambiado, porque establece la Función Económica Social, como ocurre en la agricultura, cuyo incumplimiento es causal de reversión y precisó que en ese ámbito se revirtieron en favor del Estado 670 concesiones y explicó que están en marcha otras 700 inspecciones.

Respecto a la publicación que asegura la explotación minera en faldas del Illimani, Navarro aseguró que la empresa Compañía Minera Amazonas Bolivia (Comabol) tiene sólo una concesión de 15 cuadrículas, que fueron otorgadas en 2002 por la «vieja Superintendencia de Minas», pero que no tienen actividad minera como constató una inspección en la que participaron COMIBOL y AJAM (Autoridad Jurisdiccional Administrativa Minera).

Explicó que en 2014 se presentó una solicitud para la adjudicación de otras áreas en el Illimani, pero aseguró que esas solicitudes fueron rechazadas y las resoluciones ya fueron notificadas.

«No existe titularía minera en cuatro áreas y la única concesión de 15 cuadriculas de Comabol no tiene actividad minera», remarcó.

Por su parte, el director del SERGEOMIN explicó que ni en el caso de la represa de Incachaca ni de Hampaturi existe la posibilidad de contaminación de aguas.

Ratificó que no hay actividad minera en las faldas del Illimani y reconoció que 3 empresas mineras operan en la «cabecera de Incachaca», pero  extraen minerales de cuarzo, que es estéril, porque para su explotación se perfora en seco y no  se usa agua para nada, como muestran las fotografías que se tomaron en la inspección.

«Asistimos a una campaña de desprestigio», subrayó.