Las estadísticas revelan que, en Bolivia, de cada 10 mujeres 7 son víctimas de violencia, por lo que el desafío es revertir esa situación que persiste por factores como la vigencia de “una estructura institucional del Estado, completamente patriarcal y machista”, afirmó este viernes la ministra de Comunicación, Gisela López, en el inicio de la campaña «Por una Vida Sin Violencia».
“¿Por qué la violencia continúa? Deberíamos reflexionar en ese plano: Nosotros consideramos que todavía existe una estructura institucional del Estado completamente patriarcal y por supuesto machista”, aseveró la ministra en el acto de lanzamiento de la campaña, en la que participa la Cooperación Suiza.
La campaña consiste en emitir mensajes radiales para la eliminación de la violencia contra la mujer, pero también en avanzar y consolidar las acciones conjuntas entre el gobierno nacional, gobernaciones y alcaldías en áreas de prevención, protección y respuesta institucional a las víctimas. El proyecto apunta a llegar a 80 municipios y cuatro departamentos.
La encargada de Negocios de la Embajada de Suiza en Bolivia, Nadia Ottiger, destacó en el acto de lanzamiento de la campaña la importancia de los esfuerzos institucionales conjuntos para el objetivo de reducir y eliminar la violencia contra la mujer y garantizarle una vida digna y libre de violencia.
Los ministerios de Comunicación, Justicia, Salud y Educación forman parte de este desafío. López explicó que Bolivia construyó una estructura jurídica para prevenir y luchar contra la violencia a la mujer. En esta línea, mencionó la tipificación del delito de feminicidio, la ley contra el acoso político y la discriminación.
Reflexionó que, a pesar de ese paraguas jurídico, persiste la violencia y la tribuyó, entre otros factores, a la vigencia de una estructura patriarcal y machista. “Necesitamos trabajar, no solo con estas estructuras del Estado, sino sobre todo con la sociedad civil”, sostuvo y dijo que las alcaldías debieran asumir un rol más protagónico.