Uvaldo B., un expolicía que fue dado de baja de la institución por deserción, raptó y violó a una mujer de 25 años, a quien retuvo enmanillada durante tres días en un subterráneo dentro de su vivienda ubicada en el sector de Tirani, en Cochabamba.
El uniformado fue capturado y los vecinos, enterados de lo que ocurrió, quemaron la casa donde se registró el hecho.
Según informaron los familiares de la víctima, el hombre interceptó a la mujer el domingo a las 07.00 en la avenida Blanco Galindo. Vestido con uniforme, el expolicía ordenó a la mujer subirse a su motocicleta para supuestamente llevarla a la estación policial cercana porque la acusó de estar drogada y embriagada; sin embargo, la trasladó hasta su domicilio.
En el sitio, el hombre intentó abusar de la joven y al encontrar resistencia la golpeó hasta lograr finalmente su cometido.
Según informó un dirigente vecinal a la red ATB, la muchacha estuvo retenida en el área subterránea de la vivienda. Sin embargo, en algunas ocasiones el expolicía la sacó del encierro, por lo que la víctima pudo identificar el sitio donde se encontraba.
Luego de tres días de abuso, la muchacha fue abandonada en inmediaciones de la zona Valle Hermoso y, tras encontrarse con sus familiares, se hizo la denuncia contra el sujeto y el jueves por la tarde dieron con la vivienda donde fue retenida.
Antes de que efectivos policiales abandonaran el sitio, el acusado llegó a la vivienda y fue detenido. Luego los vecinos comenzaron una vigilia y protesta por lo ocurrido.
José Valdivia, abogado de la víctima, explicó que cuando la joven fue interceptada no estaba en estado de embriaguez.
En la requisa de la vivienda, el jueves, se halló una vagoneta y dos motocicletas, vehículos en los que el sujeto hacía recorridos con su uniforme. También se incautaron armas e implementos policiales, elementos con los que se presume que el individuo simulaba hacer operativos. El sitio quedó precintado.
Tras la capturta y con el paso de las horas, los ánimos de los vecinos se caldearon más al conocer los detalles del vejamen que sufrió la joven y la mañana de este viernes primero derribaron una de las paredes de la vivienda y posteriormente le prendieron fuego.
Efectivos de bomberos trabajaron alrededor de dos horas para sofocar el incendio que provocó daños de consideración en la planta baja y el primer piso de la vivienda.
“No podemos permtitir que un antisocial viva con nosotros. Por eso la gente pide la expulsión y exigimos mayor seguridad”, declaró un dirigente a la red televisiva. La Policía no descarta que hayan más víctimas del sujeto.