Materiales acumulados en el cauce del río Taquiña y las persistentes lluvias por el fenómeno de la Niña débil confluyeron para desatar la mazamorra que arrasó viviendas y dejó cinco personas muertas en Tiquipaya, Cochabamba, según estudios de la Gobernación.
En una conferencia de prensa en Cochabamba, el secretario de Madre Tierra, Gonzalo Muñoz, explicó con fotografías la situación de la zona e informó que la quebrada Lindero es la más afectada.
“El área que ha sufrido más es la quebrada Lindero y es la zona donde se ha visto la mayor cantidad de material, es la remoción en masa, ésta ha bajado en grandes volúmenes y en el cauce principal ha retirado todas las obras de control mecánico”, describió.
Al momento están en curso estudios, trabajos de reforestación e instalación de un sistema de alerta con los comuniarios.
“Los pobladores, constantemente están informando porque todavía se están suscitando pequeños deslizamientos, hay un monitoreo a los caudales porque como esta lloviendo seguimos teniendo escurrimiento y los suelos están saturados. También está la posibilidad de hacer un estudio rápido pero no lo tenemos resuelto. Se tienen previstas campañas de reforestación en lo que era el parque Tunari y se reinstalarán las obras de control mecánico”, señaló.
La noche del martes 6 una mazamorra afectó viviendas y provocó la muerte de cinco persona. (14/02/2018)