El secretario Ejecutivo de la Federación Universitaria Local (FUL) de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), Jaime Grájeda, fue cesado de sus funciones por una decisión del Honorable Consejo Universitario (HCU). El depuesto dirigente denunció represalias del rector e inició una huelga de hambre.
Dirigentes del FUL, la máxima instancia de representación del estamento estudiantil, explicaron que la decisión se da en cumplimiento a la normativa universitaria que establece que el dirigente debe ser un estudiante y no puede tener más de dos años de egreso.
“El compañero se está victimizando y está adueñándose de las oficinas pero no sé cuáles serán sus afanes”, afirmó el dirigente estudiante Álvaro Quelali, quien explicó que tras la salida de Grájeda, la directiva se mantiene hasta un nuevo proceso eleccionario.
El dirigente denunció supuestas represalias y amenazas del rector de la UMSA, Waldo Albarracín, e instaló una huelga de hambre al considerar que la decisión del HCU es ilegal porque no tendría atribución para sacar del cargo al representante estudiantil.
Existe una marcada divergencia entre el dirigente y el rectorado. Grájeda cuestionó el apoyo de la UMSA a las demandas de la Universidad Pública de El Alto (UPEA) y el dirigente fue acusado de ser funcional al Movimiento al Socialismo (MAS).
El rector del UMSA negó que el haya decidido la “destitución” o “retiro” del dirigente y afirmó que las decisión se asumió en el HCU tras una investigación que hizo una comisión sobre el tiempo de egreso de Grájeda. “Yo no he intervenido”, “no tengo ningún problema con él”.
“La marcha que promoví junto con la UPEA, es una medida decidida n el congreso de universidades y el Consejo lo ha ratificado. Algunos incluso piensan que mi apoyo a la UPEA no es contundente”, afirmó Albarracín. (29/06/2018)