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Franclin Gutiérrez entierra a su hijo en medio de dolor y la solidaridad

El dirigente de Adepcoca, Franclin Gutiérrez, enterró este viernes a su hijo de dos años Jesús Franclin, en medio de muestras de dolor y expresiones de solidaridad en Tajma, Chulumani, Yungas de La Paz.

«No había estado solo, pensé que estaba solo», dijo ante la cantidad de gente congregada en la comunidad de Tajma para acompañarlo en el difícil momento de despedir a su hijo, quien murió el miércoles aquejado por una enfermedad que se agravó por la depresión de no tener cerca a su padre.

Enmanillado y custodiado por policías llegó a su casa, en el municipio de Chulumani, a 123 kilómetros de la ciudad de La Paz. Fue beneficiado por una especie de permiso humanitaria por la Justicia para que viaje y participe del velorio y entierro de su pequeño hijo.

En agosto, el máximo dirigente de la Asociación Departamental de Productores de Coca de La Paz fue recluido en el penal de San Pedro de La Paz con detención preventiva por la muerte de un policía en La Asunta, los Yungas, durante los enfrentamientos en medio de las labores de erradicación de cocales ilegales.

Fue recibido por decenas de cocaleros que portaban banderas blancas, mientras que otros lucían poleras blancas y los niños sostenían globos también del mismo color. Sus familiares fueron los primeros en recibirlo y se quebró emocionalmente al ver a su niño en el ataúd.

“Que le ilumine a su papá y le proteja de toda maldad, de toda esa injusticia que ha habido en contra de mi esposo”, manifestó Cristina Acuña, esposa de Gutiérrez, en medio del cortejo fúnebre.

El domingo deberá volverá a prisión, luego que se le negara el jueves la cesación a la detención preventiva.

Según Erbol, hubo molestia de los cocaleros por el pronunciamiento de la Defensoría del Pueblo, que llamó a los yungueños a evitar el uso de la violencia para retener a su dirigente.  (23/11/2018)