Los médicos de todo el país activaron este jueves su paro de 48 horas en contra de la forma en que el Gobierno implementa el Servicio Único de Salud (SUS), proceso que sin embargo avanza desde ayer en su etapa de registro de beneficiarios.
Y aunque la tensión por este conflicto no cesa las partes enfrentadas expresaron su apertura al diálogo, en un encuentro que se realizaría este viernes en Santa Cruz, al que sin embargo los médicos asisten con la advertencia de que se retirarán si sus demandas no son atenidas.
“Esperemos que en ese diálogo exista sinceridad, que (los médicos) vengan deponiendo actitudes y no vengan a exigir cosas irracionales”, afirmó el ministro de Salud, Rodolfo Rocabado, durante una evaluación sobre el proceso de avance del registro, que es el primer paso para activar en marzo la atención del SUS para 1.200 prestaciones.
Se declaró satisfecho por la cantidad de gente que está acudiendo al registro, no obstante a los inconvenientes que se presentaron en el primer día, especialmente en Santa Cruz. Dijo que en este caso lo que se hará es traspasar al SUS la base de datos del seguro municipal, lo que sumará unos 350.000 registros.
Reiteró que el Gobierno asistirá al diálogo acordado para la mañana de este viernes, donde explicará en detalle el sustento que respalda la implementación del SUS en un proceso gradual. “Tengo la esperanza de que podamos dialogar, que mañana al final de la tarde lleguemos a un acuerdo y la situación se normalice (…) Esperemos que el Colegio Médico tenga una posición dirigida a pensar en su pueblo”.
Los médicos también anunciaron su asistencia al diálogo, aunque bajo la condición de que se atiendan sus tres demandas fundamentales: el aumento de los recursos para el sector salud al 10% del presupuesto general, la incorporación del sector a la Ley General del Trabajo y la conformación de una mesa técnica.
“Exigimos al Gobierno el 10 por ciento del Presupuesto General del Estado para salud, porque el 6,5 por ciento que nos da no es suficiente”, justificó el secretario general del Sindicato de Ramas Médicas de la Salud Pública (Sirmes), Fernando Romero.
‘‘La anterior semana se ha definido un paro de 48 horas, con la probabilidad de que la siguiente semana sea de 72 horas y luego hagamos el indefinido. Lamentablemente las autoridades no viven la realidad (…). No están en el día a día en los establecimientos, no están frente a los pacientes, con las carencias’’, complementó el presidente del ente colegiado de El Alto, Orlando Moreira, a declaraciones a la cadena RTP. Dijo que la condición para revertir la medida de los médicos es que se detenga la adscripción porque ‘‘es engañar a la población’’.
Entretanto, el paro de 48 horas comenzó con la suspensión de actividades en al menos cinco departamentos, según reportes lograros por el equipo de La Razón y medios de comunicación televisivos.
En La Paz, por ejemplo, el paro se cumplió el Policlínico de Miraflores, el Hospital General, el Instituto Nacional de Oftalmología, el Hospital del Tórax y otras reparticiones, donde sólo se atienden casos de emergencia.
Lo mismo ocurrió en Pando, Chuquisaca, Cochabamba y Tarija, donde en varios nosocomios la atención se redujo para casos de emergencia.
En Potosí, por el contrario, se registró una movilización de médicos de 40 municipios en apoyo al sistema de salud que busca implementar el Gobierno. (03/01/2019)