La Fiscalía investiga un nuevo caso de presunta negligencia médica en Santa Cruz de la Sierra. Una joven dio a luz un bebé prematuro que fue declarado muerto por los médicos, pero cuando el infante era vestido para colocarlo en un cajón y luego velarlo, uno de los familiares se percató que seguía con vida, por lo que fue llevado nuevamente a la maternidad Percy Boland para internarlo en una incubadora.
El fin de semana se conoció este caso que es investigado por el Ministerio Público por los delitos de lesiones graves y gravísimas.
La tarde del jueves Aidé N. acudió al maternológico de la capital cruceña con dolores de parto cuando solo tenía 24 semanas de gestación de las al menos 36 que deben cumplirse. Tras ser atendida le comunicaron que iba a dar a luz.
“En esas circunstancias nace el bebé y resulta que el médico le entrega al niño (a los familiares) para que le de cristiana sepultura, el médico incluso emitió el certificado de óbito porque el bebé estaba muero”, informó Lorgio Riveros, fiscal de materia, a la red Uno.
Una vez en su vivienda, los familiares de Dhilan Daren –así lo llamaron los padres- instalaron el velorio y cuando lo cambiaban para colocarlo en el pequeño féretro, una de las tías se dio cuenta de que el infante respiraba.
La mujer llamó inmediatamente a su hermano, el padre del menor, para comunicarle del hecho, trasladando al pequeño nuevamente al hospital.
«El niño se encuentra felizmente con vida. Hemos solicitado el historial clínico de lo que verdaderamente sucedió en el parto», dijo el fiscal, quien adelantó que citará a declarar a los médicos que atendieron el parto para dar con los responsables de este hecho.
El pequeño Dhilan, el segundo de la pareja que vivió este calvario, se encuentra al momento estable al igual que su madre, quien también está internada en ese centro de salud. (11/02/2019)