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Niños cruceños llegan en autos de juguete al quirófano

Someterse a una cirugía es una experiencia traumática para cualquier niño. Por ello y con el fin de aliviarles el estrés, el hospital Japonés incorporó dos carros de juguete que llevan a los pequeños pacientes hasta la sala de operaciones. Hay buenos resultados.

Lucía Cava, cirujana del nosocomio público de tercer nivel de la ciudad de Santa Cruz, explicó que adquirieron el primer coche de juguete, un jeep a control remoto,  con recursos aportados por los médicos del área de Pediatría; el otro vehículo, que funciona a pedales, fue donado por una persona.

“Tras observar que los niños con cirugías programadas se resistían a separarse de sus padres cuando ingresaban al quirófano, decidimos comprar el carro, tomando como ejemplo lo que hizo un hospital europeo”, relató Cava.

En el jeep puede subir un niño de hasta 35 kilos de peso. El médico responsable de la cirugía es quien dirige el carrito hasta uno de los quirófanos. El otro auto fue donado por Editha Prieto, madre de un pequeño paciente del Japonés que utilizó el primer coche.

Cava aclaró que el uso de los carros está reservado para pacientes estables que llegan al hospital para someterse a una cirugía ambulatoria y no para aquellos en estado de gravedad, quienes sufren dolores y no pueden ser movidos.

Leonardo Gómez, otro integrante del equipo de Pediatría del Japonés, liderado por el médico Germán Quevedo, espera que otros centros hospitalarios imiten esta iniciativa exitosa.

La cirujana recordó que la primera en estrenar el carro a control remoto fue Kendra López, cuando tenía nueve meses, el 20 de febrero. La bebé se sometió a un control luego de superar un complicado trasplante de hígado, realizado por un equipo de especialistas norteamericanos y bolivianos el 16 de enero del año en curso.

“Aprovechando que la niña estaba en su control en el hospital, la subimos al autito y la llevamos al quirófano. Obviamente que ella fue operada anteriormente y ahí observamos la felicidad en su rostro y eso nos dejó muy satisfechos”, comentó la especialista.

Kendra es la tercera paciente que en Santa Cruz accedió al trasplante de hígado, órgano donado por su padre, de 21 años. La intervención quirúrgica fue gratuita gracias al trabajo solidario de los profesionales y a los aportes que permitieron cubrir los costos de los medicamentos.

Víctor Hugo Zambrana, director general del hospital Japonés, resaltó la iniciativa del Servicio de Cirugía Pediátrica, de conseguir el carro por sus propios medios para levantar los ánimos a los pequeños pacientes.

Señaló que desde la implementación de esta medida terapéutica disminuyó el estrés en el paciente y se obtuvo ventajas desde el punto de vista físico y orgánico para la cirugía de los niños.

“La iniciativa de Quevedo y su equipo es muy conveniente y útil, y se verá posteriormente mejores resultados, ya que apenas se lleva dos semanas con el auto”, resaltó la autoridad del nosocomio.

El Japonés es pionero en Santa Cruz y el país en esta iniciativa, que ya se aplica con éxito desde el año pasado, por ejemplo, en hospitales de Reino Unido, Costa Rica, España o Perú con el mismo objetivo: reducir el estrés y el miedo en los pequeños pacientes.

Tras el éxito, el centro médico tiene la proyección de adquirir un tercer carro de juguete, con el fin de seguir brindando una atención de calidad a los niños, pues se demostró la reducción del estrés al momento de la cirugía. (12/03/2019)