El presidente Evo Morales viajó este martes hasta Roboré, Santa Cruz, para dirigir el Gabinete de Crisis Ambiental instalado en esa región para verificar los avances de las tareas de mitigación del incendio forestal que golpea a la Chiquitanía y que ya arrasó cerca de un millón de hectáreas de pastizales y bosques. El mandatario dijo que la prioriodad "es apagar el fuego a toda costa".
“Nos trasladamos a Roboré a incorporarnos al Gabinete de Crisis Ambiental, el incendio en la Chiquitania es un peligro para todos porque afecta a nuestra #MadreTierra. Debemos unirnos para detenerlo. Nuestra máxima prioridad es apagar el fuego a toda costa. #UnidadEnLaAdversidad”, reseñó en su cuenta de Twitter.
En otro mensaje en la misma red social, remarcó que “enfrentamos como país un desafío muy grande; una tarea muy difícil que exige lo mejor de nosotros”.
“A nombre del pueblo boliviano, agradecemos el desprendimiento y sacrificio de nuestros brigadistas y voluntarios para apagar el incendio. No están solos. #UnidadEnLaAdversidad”, añadió.
Los focos de calor en la Chiquitanía y otras regiones del territorio cruceño bajaron en número, pero el fuego llegó al parque nacional de Otuquis y amenaza al área protegida de Santa Rosa de Tucabaca. En Río Negro y San Matías hay líneas de fuego de magnitud.
El ministro de Defensa, Javier Zavaleta, informó en una última evaluación de lunes desde Roboré, centro de operaciones del Comando de Incidentes, de la reactivación del fuego en Charagua, en la provincia Cordillera; mientras que en Río Negro, en el extremo sur cruceño, una línea de fuego mantiene un incendio de magnitud.
Desde muy temprano, una comitiva del gabinete y el Comando de Incidentes hacen un sobrevuelo para planificar las labores de este martes y trazar el plan de vuelo del Supertanker, avión cisterna que coadyuva en las tarea de sofocación. (27/08/2019)