El subcomandante departamental de la Policía de La Paz, Richard Olivares, se emocionó hasta las lágrimas en el homenaje póstumo al tercer policía fallecido por coronavirus. Pidió a la población quedarse en sus casas, porque de persistir en lo contrario pone en riesgo a la población y “no sé –dijo- dónde llegaremos”.
“No hay palabras para expresar la muerte de una persona, mucho más si es un camarada; pedir a la población, por favor, no salga de su casa, no salga porque puede contagiar a sus familiares, nos puede contagiar a nosotros y nosotros a ustedes, esto es un círculo vicioso”, expresó en la plaza del Estudiante, visiblemente afectado por la muerte de otro uniformado.
Distintos distritos policiales del país rindieron homenaje con un minuto de silencio al cabo Porfirio Ramos, quien perdió la vida en Trinidad, Beni, por COVID-19. Como el resto de sus camaradas, estuvo en las calles controlando que la población cumpla con la cuarentena para cortar la cadena de transmisión de la enfermedad que golpea a esa región boliviana con mayor fuerza.
En la ciudad de La Paz ya se tiene 87 efectivos que dieron positivo al COVID-19, de los cuales 30 están en el centro de aislamiento y los 57, en sus domicilios.
“Pedirle a usted, amigo, amiga, quédense (en casa); no crea que es lindo dar noticias desagradables, no crea que es lindo decir que una persona, un amigo, un familiar ha fallecido, de esto tenemos ya mucho”, expresó.
Reiteró a la población cuidarse de esta enfermedad que ya cobró la vida de otros dos policías en la ciudad de Santa Cruz, uno se reportó el 23 de abril y el otro el 2 de mayo. “Nosotros vamos a seguir saliendo por ustedes, pero si ustedes no colaboran, no sé dónde llegaremos”. (10/05/2020)