El paciente 13 de Cobija (Pando), un comerciante que dio positivo al coronavirus, tuvo al menos 120 contactos, entre ellos 14 médicos y enfermeras, y cuatro militares, quienes guardan aislamiento domiciliario, mientras que al resto se pidió hacer lo mismo. La ciudad no cuenta con la cantidad suficiente de pruebas para confirmar si hubo o no contagio.
“Entre los contactos directos de este paciente hay 14 funcionarios de salud, pero hay también contactos indirectos, que son familiares, amistades y otros que suman más de 120 personas. No es que el paciente contagió a 120 personas, son contactos aún”, informó Kuniaki Murakami, director del Servicio Departamental de Salud (Sedes) Pando.
El protocolo de salud para el COVID-19 indica que todo contacto debe permanecer aislado de forma obligatoria en su domicilio por 14 días y que la prueba solo debe tomarse si presenta algún síntoma. Las pruebas que Pando envía al Cenetrop (Centro Nacional de Enfermedades Tropicales), en Santa Cruz, tardan cinco días en llegar esta región.
El paciente 13 es un varón de 34 años que se dedica al comercio informal y cruza habitualmente a las ciudades brasileñas de Epitaciolandia y Brasilea por mercadería. En esas dos regiones hay unos 80 casos positivos de coronavirus.
“Al otro lado de la frontera hay 80 casos positivos y como él (paciente 13) hay varios que van y vuelven, por eso existe el peligro que en Cobija la incidencia de casos pueda aumentar, porque varios bolivianos cruzan al otro lado por motivos de comercio de manera irregular e incumpliendo las normas sanitarias”, alertó el presidente del Colegio Médico de Pando, Andrés Antezana.
El galeno observó que el departamento no cuenta con la cantidad de pruebas suficientes. “Hay 14 médicos y enfermeras que sí están aisladas porque han estado en contacto directo y en varias oportunidades con el paciente, pero como tenemos el problema con las pruebas laboratoriales, porque lo ideal sería haberles hecho el test a los 120, a las demás personas que tuvieron contacto se les pidió estar en sus casas”.
Añadió que se tiene el registro domiciliario de las 120 personas y los tres barrios a donde el comerciante infectado acudió, gracias al trabajo de los equipos de vigilancia.
“El resto de contactos indirectos está aislado domiciliariamente hasta que se les haga la prueba de laboratorio, entre ellos hay también cuatro militares, pero el paciente positivo está en un centro de aislamiento”, corroboró Hugo Cardozo, secretario ejecutivo del Sirmes (Sindicato de Ramas Médicas de la Salud Pública) Pando.