La Agencia de Infraestructura en Salud y Equipamiento Médico (AISEM), del Ministerio de Salud, descartó irregularidades en la adquisición de reactivos para pruebas COVID-19 y afirmó que no se optó por la oferta de la firma uruguaya ATGen, que ofrecía un precio Bs 25 millones menos que la empresa elegida, porque no ofrecía garantías de calidad.
De acuerdo con los documentos a los que accedió La Razón Digital, el proceso de adjudicación se abrió el 30 de julio y 15 empresas presentaron su cotización para los ítems requeridos. El primer ítem se refiere a 7.000 reactivos “kit SARS-COV-2”, con un precio referencial unitario de Bs 10.000, o sea, en total Bs 70 millones.
Tras la apertura de propuestas, se tiene que el laboratorio uruguayo ATGen SRL planteó un precio total de Bs 22,8 millones, mientras que la firma china Lasa Holdings, Bs 47,3 millones, es decir, Bs 25 millones más. En la lista figura otro planteamiento bajo, de Entelequi, con Bs 32,7 millones. Al final, 13 de las 15 compañías dieron sus precios para adjudicarse el ítem.
“No se adjudicó la compra a esa empresa, aunque sus precios eran bajos, por una razón muy importante: el producto que ofreció esta empresa NO tiene las garantías de calidad necesarias», informó la AISEM, mediante un comunicado difundido la noche del viernes.
La institución descentralizada reportó que la empresa solo cuenta con el certificado de calidad del Gobierno de Uruguay. «Para comprar este tipo de productos de salud se requiere certificación de calidad de Estados Unidos (el certificado FDA) o de la Unión Europea (el certificado CE). Requerir dichas certificaciones es una práctica común y corriente en todo el mundo para asegurar que las pruebas sean de calidad», se lee en el comunicado.
Aparte, acusó a la firma ATGen de no rellenar los formularios que la norma exige para la licitación, por lo cual no cumplió con las formalidades, y que se limitó a «enviar un folleto con publicidad describiendo su producto», por lo cual no cumplió con el requisito de enviar las especificaciones de los reactivos.
“Nunca vamos a comprar un producto que NO tenga la certificación de garantía de calidad necesaria para preservar la salud. No jugamos con la salud. Y por eso nos tomamos muy en serio la calidad de los medicamentos y de los productos que compramos para cuidar la salud de los bolivianos”.
La AISEM informó que el contrato para la adquisición de los reactivos aún no fue firmado y que el proceso, que defiende fue transparente, está disponible para ser verificado. “La licitación fue pública, de carácter internacional y se cumplió con todas las normas que el proceso requiere”.
(15/08/2020)