Tras la imputación por el delito de homicidio contra el presidente del Colegio Médico de Bolivia, Luis Larrea, el Consejo Nacional de Salud (Conasa) decidió iniciar el lunes un paro indefinido, pero la medida de presión será desactivada si la Justicia permite a Larrea defenderse en libertad en la audiencia cautelar fijada para las próximas horas.
Freddy Fernández, secretario General del Colegio Médico de Bolivia, informó que en una reunión virtual de este viernes con los representantes de las nueve regionales se decidió ir al paro en defensa de Larrea, quien fue llevado a celdas policiales tras ser aprehendido e imputado por la denuncia de homicidio presentada por su hermanastro.
Si la audiencia cautelar deja defenderse en libertad al acusado, el paro se suspenderá. Justamente los representantes médicos fueron convocados para el lunes a una reunión presencial en La Paz y ahí se suspenderá la extrema medida, explicó Fernández en una entrevista con la red Uno.
Mientras que el abogado de Larrea, Moisés Pérez, afirmó que la imputación contra su defendido “no tiene sustento” y observó que lo identifican como Presidente del Colegio Médico de La Paz cuando en representante del Colegio Médico de Bolivia.
El fiscal Israel Rojas afirmó que contra el acusado “hay indicios suficientes para establecer que es partícipe del delito de homicidio” por la muerte de su padre, ocurrida en junio de 2021.
“Por lo menos (debió de) tratar de auxiliarlo en su condición de médico, en su condición de médico podría darle los primeros auxilios y llevarlo a muchos lugares. Según las investigaciones preliminares el señor Larrea estaría 10 días con sintomatología grave”, informó Rojas y explicó que el padre de Larrea murió por COVID-19.
Consultado por periodistas de los motivos de su aprehensión, Larrea respondió escuetamente: “El deceso de mi padre de hace un año atrás, sin tener ninguna prueba y presentando todos los descargos”.
La denuncia fue presentada por Leonardo Serafín Larrea Gutiérrez, “uno que supuestamente es hijo de mi padre, que hace 15 años no lo había visto a mi padre”, informó en un contacto con Erbol mientras era trasladado desde la Fiscalía hasta instalaciones policiales.
Fernández consideró que hay intereses políticos.
“Estamos seguros que se trata de una persecución política. Para nosotros es un proceso totalmente montado e inventado. No concebimos que el doctor Larrea haya sido partícipe del desenlace fatal de su padre”, insistió.