El alcalde Iván Arias no descartó restringir el consumo de agua potable por horas en la ciudad de La Paz, debido a la demora en la llegada de las lluvias y el descenso del caudal en la represa de Incachaca por el incremento en el gasto del líquido elemento.
El lunes, lanzó una feria de concientización sobre el cuidado del agua, donde reconoció que tras conversar con el interventor de la Empresas Pública y Social de Aguas y Saneamiento (EPSAS), Bladimir Iraizos, se asumirán medidas para un uso racional del elemento vital.
“No podemos volver a pasar la crisis que nos pasó hace cinco años y eso pasa por restricciones en determinados horarios y controles más estrictos de las filtraciones, con EPSAS estamos haciendo un relevamiento de filtraciones porque se pierde mucha agua por cañerías viejas, estamos con EPSAS para que se identifique estas cañerías viejas y se las cambie pronto”, dijo Arias, según la Agencia Municipal de Noticias.
EPSAS también se mostró partidaria de asumir medidas preventivas en caso de que la lluvia no llegue hasta diciembre, pese a que garantizó que el suministro será suficiente hasta enero del próximo año, “aunque no llueva”.
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Arias adelantó que junto a EPSAS plantearán un cambio de cañerías en la ciudad de La Paz para evitar que el agua “se filtre en agujeros y más bien sea preservada para un buen uso”.
“Usted, ¿qué hace con el agua con la que lava su ropa? Seguro la tira al canal cuando esa agua puede utilizarse para lavar sus baños, ponerla y no botarla. Las duchas, los jóvenes y las personas utilizan máximo una ducha tres a cuatro minutos, no le echan cinco a 10 minutos, como si el agua fuera infinita, por eso se requiere conciencia ecológica”, indicó Arias.
La Alcaldía lanzó el lunes la campaña denominada “Cierra el grifo siempre que no lo uses”, con el objetivo de sensibilizar a la ciudadanía sobre el manejo adecuado del agua potable.
Esa medida fue asumida tomando en cuenta que las reservas del líquido en La Paz están al 50%.
Esa tarea irá acompañada de operativos en sectores donde se desperdicia el agua de forma recurrente y sin control, entre ellos en los lavaderos de vehículos.