Las voces de 11 mujeres fueron silenciadas por la violencia machista en el departamento de Cochabamba, entre el 1 de enero y el 19 de diciembre de 2022.
Todas tenían planes, sueños por cumplir. Y todas eran madres. Quedaron 32 niños, niñas, adolescentes y jóvenes huérfanos.
La mayoría de ellos fueron testigos de las terribles muertes de los seres que más amaban en manos de sus progenitores.
Tanto la primera como la última mujer asesinada en Cochabamba habían dado a luz a cinco hijos. Otra más adulta, de 70 años, dejó cuatro en la orfandad.
Una tuvo tres hijos, aunque criaba también a los dos hijos de su marido, el hombre que, finalmente, la mató. Cinco tuvieron dos hijos cada una, con edades de dos hasta nueve años.
Todos estos huérfanos de la violencia, ahora están con sus familias ampliadas, esto quiere decir que viven con sus abuelos o tíos luego de muerte de sus progenitoras y la reclusión de sus padres, según el informe.
Las autoridades destacaron que, a diferencia de años anteriores, las cifras de feminicidios en Cochabamba y en Bolivia han disminuido y que eso significa que la violencia machista se ha reducido.
“Lastimosamente, esto no es cierto pues hay cifras como las tentativas de feminicidio y los homicidios suicidios (cuando un hombre violento orilla a las mujeres víctimas a quitarse la vida), que no son muy visibilizadas por los administradores de justicia y no se puede hablar de una disminución de la violencia”, indicó la abogada del Observatorio de Justicia de la Fundación Voces Libres, Mercedes Cortez.
Entre el 1 de enero y el 30 de septiembre, hubo 145 tentativas de feminicidio en Bolivia. Esto significa que 145 mujeres estuvieron a punto de morir en manos de un violento.
Si sobrevivieron no fue porque los agresores se hayan arrepentido, sino por circunstancias ajenas a su voluntad de verlas muertas.
De acuerdo con datos de la Fuerza Especial de Lucha contra la Violencia (FELCV), en Cochabamba, del 1 de enero al 20 de diciembre, se registraron 26 tentativas de feminicidio.
Los homicidios suicidios también pasan desapercibidos, pero son una trágica consecuencia de la violencia machista.
Las mujeres cuya autoestima ha sido destruida, que han sido aisladas de sus familias, de sus amigos; que están profundamente deprimidas y que ya no soportan los golpes, insultos y amenazas de muerte, terminan quitándose la vida porque sus agresores les han hecho creer que ya no hay salida para ellas.
En Cochabamba, según la FELCV, entre el 1 de enero y el 20 de diciembre, hubo 8 homicidios-suicidios.
“No existe una cifra oficial del número de este tipo de casos en Bolivia y hay que empezar a exigirla para seguir visibilizando los frutos perversos que genera a escala nacional la violencia machista, además, del feminicidio como tal”, explicó la abogada especialista en violencia contra las mujeres, Mercedes Cortez.
El Observatorio de Justicia de la Fundación Voces Libres elaboró un cuadro que resume los 11 casos de feminicidio registrados y que permite visibilizar estos datos:
1.- Las mujeres asesinadas tenían entre 21 y 70 años; cuatro, entre 21 y 29; tres, entre 32 y 34 años, y una tenía 48 y otra, 70.
2.- Cinco mujeres fueron asesinadas en el municipio de Cercado. A cuatro les arrebataron la vida en la provincia Chapare, en Sacaba, Colomi, Shinahota y Entre Ríos. Una fue encontrada en Santivañez y otra en el municipio de Quillacollo.
3.- El mayo hubo más feminicidios. Tres mujeres fueron asesinadas en el “mes de las madres”. En los meses de enero y abril hubo dos. En julio, octubre y noviembre hubo un feminicidio.
4.-En cuanto al tipo de muerte, cinco mujeres fueron estranguladas o asfixiadas, tres fueron apuñaladas; una fue muerta con heridas de picota, otra fue arrojada desde un peñasco y quemada. Otra por golpes de puños y patadas.
5.-Respecto al nexo que había entre las mujeres y los feminicidas, se evidenció que cinco de ellos eran sus parejas o convivientes; cuatro eran sus esposos y dos eran sus exparejas.
6.-Todos los feminicidas fueron capturados y 9 de los 11 fueron sentenciados por su delito. Ocho a 30 años de cárcel y un adolescente a 6 años. Otros dos acusados de feminicidio tienen detención preventiva.