¿’Romantizar’ de la maternidad en adolescentes o enfrentar seriamente el problema?
La falta de información, el bloqueo a la malla curricular sobre educación sexual, la debilidad institucional, la “romantización” de la maternidad o la “cultura de la violación” son algunos factores importantes en el problema de los embarazos de niñas y adolescentes.
En Piedra, Papel y Tinta hablan de los factores que inciden en el incremento de embarazos en adolescentes. Foto: La Razón
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La falta de acceso a la información sobre los métodos anticonceptivos, los imaginarios sociales y la “romantización” de la maternidad, y la debilidad institucional son algunos de los factores que inciden en el incremento de embarazos en adolescentes y niñas en el país.
Esas conclusiones fueron abordadas en Piedra, Papel y Tinta, de La Razón, con un panel de expertos y funcionarios de Estado, que coincidieron en proponer una lucha frontal contra el problema y la generación de políticas en la materia, una de ellas la Ley de Educación Sexual y Reproductiva.
La coordinadora de Oxfam Bolivia, Lisbeth España, señaló que el 91% de las adolescentes en el país conoce sobre la anticoncepción; sin embargo, para acceder a los anticonceptivos, deben atravesar por una serie de barreras, una de ellas, la visión patriarcal.
“Hay una visión bastante patriarcal en relación a cómo debes elegir los anticonceptivos y, sobre todo, cómo debes tener el control de tu cuerpo. Tú tienes una gama de anticonceptivos para elegir, pero no deberías hacerlo; no estás en edad de poder decidir sobre tu cuerpo”, cuestionó la especialista.
Falta de capacidad de los funcionarios en temas de educación sexual
El segundo elemento es la falta de capacidad de los proveedores en salud al momento de brindar información sobre métodos anticonceptivos a adolescentes que decidieron iniciar su vida sexual. “Hay toda una gama de pensamientos sobre qué información debo darle yo a una joven de 16 o 17 años sobre los anticonceptivos si soy proveedor de salud”, opinó.
Otro de los bloqueos del uso de los anticonceptivos y el control del cuerpo es “la cultura del amor romantizado”. Ésta va más allá de la “prueba del amor”; en la mayor parte de los casos uno de los dos enamorados condiciona al otro: “Si me quieres, no beberías usar anticonceptivos”.
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La romantización del derecho sexual y la maternidad
En la última barrera, la sociedad juega un importante rol en lo “maravilloso” que es ser madre, la “romantización” de la maternidad. “El mundo le dice a esta joven lo maravilloso que es tener un hijo y que es posible que cuando tengas un hijo, vivas una felicidad plena”, ironizó España.
La pobreza y las uniones tempranas de adolescentes
La viceministra de Igualdad de Oportunidades, Nadia Cruz, agregó que la pobreza es otro de los elementos predominantes en el incremento de embarazos en adolescentes. La pobreza coloca a la mujer en una situación de vulnerabilidad y dentro las familias las convierte en una fuente de supervivencia, que sigue latente en la actualidad.
La funcionaria reconoció que, pese al avance de políticas públicas de protección a las mujeres y niñas, las uniones tempranas y los matrimonios infantiles aún son permitidos en algunas comunidades del país, y son factores que inciden en la problemática de los embarazos tempranos.
El ingreso de la pandemia del COVID-19 en el país ha imposibilitado el acceso a los servicios de salud y con ello la paralización de los proyectos de educación sexual y reproductiva en jóvenes y adolescentes. Cruz señaló que el país cuenta con 120 centros de Atención Integral de las y los Adolescentes (AIDA). Los AIDA son servicios de salud que están focalizados en este grupo etario.
La educación sexual en la malla curricular
Sobre la prevención de embarazos, consideró que la educación sexual integral que se intenta implementar desde el Ministerio de Educación en la malla curricular es un pilar fundamental para evitar la problemática.
Sin embargo, cuestionó que la iniciativa quede truncada por el conflicto que genera, por ejemplo, en el magisterio urbano del país, actualmente movilizado contra el programa. “Es un retroceso” para la educación sexual, afirmó.
Asimismo, lamentó que a estas alturas los adolescentes y jóvenes todavía se enfrentan a barreras en el acceso a la información sobre educación sexual. Si bien un 90%, y en el caso de los hombres un 94%, conoce sobre métodos anticonceptivos, solo 16 de cada 100 adolescentes con vida sexual activa admitió utilizar un método anticonceptivo.
Lineamientos religiosos e ideológicos
Así como los proveedores de salud, los funcionarios de las defensorías municipales también carecen de capacidad técnica en el trato de víctimas de violencia sexual. “Requieren despojarse de lineamientos religiosos e ideológicos que normalizan hechos de violencia”, fustigó la viceministra.
Develó que entre 2015 y 2022 se han registrado en el país 29.293 casos relacionados a la afectación de la sexualidad de los menores de edad.
Cultura de la violación
Por su parte, Ana Paola García coordinadora de la Casa de la Mujer en Santa Cruz, enfatizó que “una niña no debería ser madre” y agregó que detrás de un embarazo adolescente —en la mayor parte de los casos— hay un hecho de agresión sexual.
“Cuando una niña se embaraza, su proyecto de vida se detiene y cambia, pero también genera un impacto económico al Estado; son más de $us 3.073.003 que pierde el Estado en embarazos de niñas y adolescentes”, dijo.
A propósito, el jefe de la Unidad de Derechos de la Mujer de la Defensoría del Pueblo, Nehemías Vidal, dijo que en 2019 el Estado erogó Bs 26,5 millones en la atención prenatal y obstétrica de niñas y adolescentes.
Asimismo, argumentó que la problemática de los embarazos a temprana edad se debe más a una cuestión estructural enfocada a diferentes causas.
Debilidad institucional
Una de ellas es la debilidad institucional. En este punto coincidió con Cruz, dijo que hay carencia de la capacidad de servicios municipales, en las defensorías de la niñez y adolescencia. Estas tareas deberían estar enfocadas en la prevención.
Sobre los métodos anticonceptivos, dijo que dentro de la seguridad social en el país “no hay presupuesto para la adquisición de métodos anticonceptivos” y mucho menos para dotarlos a los jóvenes y adolescentes.
Falta de leyes de educación sexual integral
Adelantó que ante la ausencia de una ley de derechos sexuales y reproductivos, desde el Ministerio de Salud se está trabajando en un anteproyecto de ley de Derechos Sexuales y Reproductivos y que como defensoría, también, se coordina con los gobiernos municipales en trabajos de prevención de embarazos tempranos.
Propuso el fortalecimiento institucional de las entidades llamadas a trabajar en la prevención de embarazos de adolescentes. Hay que cumplir con la Sentencia Constitucional 206/2014, dijo.
Según develó, con base en fuentes oficiales, en el país hay 89 casos de embarazos en adolescentes por día. Dijo que, de ese porcentaje, son cinco casos de menores de 15 años por día.
Consideró que la cifra plantea un problema estructural que amerita una solución a partir de distintos factores.