La Fiscalía y la Policía de Cochabamba coordinan labores para implementar estrategias y afrontar los crecientes hechos de secuestros que se registran en los municipios del trópico cochabambino.
La fiscal Departamental de Cochabamba, Nuria Gonzales Romero, informó ayer que se desarrolló una reunión entre el Ministerio Público y la Policía en la que se acordó reforzar y continuar hasta esclarecer las investigaciones de los trece casos suscitados a la fecha.
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“Son varias acciones que se están realizando. El secuestro es un delito muy sensible porque tiene que ver, eventualmente, con el sometimiento de una persona, la privación de su libertad personal con la posibilidad de que la misma pueda sufrir lesiones o pueda atentarse contra su vida por un beneficio o recurso económico por su rescate; es por ello nuestra profunda preocupación”, dijo.
De enero a la fecha, según la funcionaria, en el Trópico de Cochabamba se registraron 13 casos de secuestro en los municipios de Puerto Villarroel, Entre Ríos, Villa Tunari y Chimoré, de los que en cuatro casos existen seis personas con detención preventiva (cinco varones y una mujer). Además, dos casos con personas identificadas y los demás se investigan como autor o autores.
También resaltó que, en los últimos dos casos, las víctimas son niñas, niños y adolescentes, que fueron separados de sus hogares y luego abandonados después de que sus captores pidieran recompensas económicas.
En esta reunión participaron la Fiscal Departamental de Cochabamba; el director de La Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC), Freddy Medinacelli; el comandante Regional del Trópico, Rubén Cornejo; investigadores policiales y fiscales de materia de los Asientos del Trópico.