Este año, la Policía pretende aplicar un nuevo plan para tratar de frenar la delincuencia en el municipio de El Alto. Consiste en un trabajo de la mano con los vecinos de las identificadas zonas rojas, donde se busca intervenir mediante capacitaciones y coordinaciones.
«Nosotros tenemos identificadas cuatro áreas sensibles, pero inicialmente vamos a activar este plan de operaciones en la Ceja, a partir del mes de febrero. Para ello estamos generando una orden de operaciones, la cual va a desarrollarse dentro de dos ámbitos: tanto operacional como social», indicó el comandante de la Policía de El Alto, Gunther Agudo.
Es justamente en este ámbito social que se espera tener el apoyo de los vecinos. Con ellos se pretende sumar un aliado en la lucha y la prevención de la delincuencia, y permitir un trabajo coordinado.
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«Vamos a tener reuniones, talleres, con todos los vecinos de todo lo que implica la Ceja de El Alto, porque es ahí inicialmente donde vamos a generar un barrido de la delincuencia; para que ellos también de alguna forma interactúen con la Policía y coadyuven en la seguridad ciudadana».
En la Ceja, donde inicialmente se aplicará el plan, se identificaron múltiples problemas, entre ellos la existencia de bares clandestinos, lenocinios y hasta alojamientos que permiten el consumo de bebidas alcohólicas durante todo el día.
«De ahí que vamos a trabajar de manera coordinada con ellos (vecinos), con el gobierno municipal para este plan que se está elaborando».