Huellas de una trama
Cholitas futbolistas Hip-Hoperas y Chola Lisas con fondos de empapelados antiguos son algunas de las imágenes construidas a partir de fragmentos tomados de anuncios, ilustraciones de revistas y publicaciones antiguas. Morelia Erostegui combina estas apropiaciones de símbolos pop con sus propios dibujos a tinta o con patrones de tejidos indígenas.
Sus obras enlazan idiomas, actitudes y ritmos distintos pero que comparten un solo pentagrama. Aquí conviven diferentes formas y registros que nos abren puertas a posibilidades sorprendentes.
Su trabajo polifacético nos transporta a zonas intermedias de reflexión visual marcando un beat en este juego donde la abstracción y lo figurativo se disuelven en trazos de colores.
Trabaja con todo lo que tiene a la mano, cimentado en ver lo que quiere ver, uniendo campos pictóricos veteados con materiales estampados. Sus collages o pinturas duplicadas conviven con elementos diversos para crear plantillas y esténciles con los que empieza a tejer historias.
En sus últimos trabajos esta artista ha demostrado un interés por el textil como esa anatomía misteriosa del hombre que no debe morir; como ese nudo de mentalidades que se cruzan con otros elementos, creando nuevos códigos.
A primer golpe de vista los trabajos de esta artista parecen simples repeticiones de figuras. Sin embargo, se trata de patrones textiles calcados de tejidos de comunidades indígenas. Sus estudios de la sociología y la comunicación le han llevado a experimentar y trabajar con fenómenos colectivos; su principal trabajo comenzó pintando tramas singulares de espacio y tiempo en la calles.
En Erostegui, lo rural se despliega en entornos urbanos, plasmado en materiales que activan una nueva lectura de la historia colectiva que lleva las formas al límite. Si el oficio del tejer simboliza la estructura y el movimiento del universo, esta artista construye imágenes a través de plantillas, pero con el mismo rigor del tejido. Crea visualidades poderosas hilvanando un lenguaje de voces entretejidas con las que pone de manifiesto que la fuerza del trabajo radica en su contenido.
PROYECTO. Museo de papel es una plataforma de difusión que visibiliza a creadores que están fuera del circuito artístico establecido y que, más allá del dominio técnico, ofrecen una reflexión poética sobre la creación artística. Este museo no exhibe en un espacio físico, ni atesora, consagra o jerarquiza obras; es un dispositivo que amplía la mirada hacia un horizonte mestizo donde conviven lenguas, temporalidades y culturas.
Se trata de un proyecto de la Fundación Cinenómada para las Artes, con el apoyo del periódico La Razón, el Centro Cultural de España en La Paz y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo.
Artista de la semana
Morelia Erostegui
Pensar la ciudad implica, entonces, asumir el lugar estratégico que ella ocupa hoy en el cruce de los debates teóricos con los proyectos políticos, las experimentaciones estéticas y las utopías comunitarias. Para lo cual necesitará alentar un pensamiento nómada y plural, capaz de burlar los compartimentos de las disciplinas y convocar los diversos lenguajes de las ciencias y las artes….
Jesús Martín Barbero – Filósofo