Detrás del telón
Esta creativa pareja de artistas paceños siempre está en mutación, cambiando de piel todo cuanto encuentra a su paso. Sus creaciones van desde peluches, cuadernos, poleras, imanes, stickers hasta otros objetos extraños que se disparan a múltiples formatos expresivos.
Empezaron confeccionando peluches personalizados con materiales reciclados, sea ropa vieja o telas encontradas.
Los objetos son experimentos únicos en sus formas, están inspirados en la música, la ilustración, el cine y los mitos y leyendas bolivianos.
Sus últimos trabajos son instalaciones, pequeños teatrinos llenos de sorpresas. Mediante fotografías, dibujos, y materiales diversos representan una mezcla de realidad cotidiana y fantasía. Los teatrinos, esos pequeños escenarios en los que los personajes parecen cobrar vida por arte de magia, han despertado la curiosidad de propios y extraños a lo largo de la historia de las artes escénicas.
Gabriela Carrión y Leonardo Romero tienen formación en diseño gráfico, pero se definen autodidactas. Han descubierto el oficio haciendo objetos sin límite expresivo. Los artistas acumulan todo tipo de restos de objetos domésticos, papeles y revistas, telas, juguetes, ropa, muebles y fragmentos que el naufragio urbano arroja a los rincones del mundo. Con esos modestos materiales Artemutante ha sido capaz de revelarnos fantásticas historias.
Es asombroso el repertorio de formas y materiales que utilizan estos artistas en sus obras. Juegan con las sensaciones y los sentimientos de manera notable. Logran la fortaleza de un lenguaje muy personal que domina lo más íntimo de la naturaleza humana.
Telas rayadas, pop, lisas, surrealistas, pasteles, retro, brillantes y futuristas elevan un mundo de calores y colores que nos muestra una veta más del ser humano. Todo visto por los ojos y producido por las manos de tejedores de tramas con mucho sentido del humor.
Sus personajes de trapo tienen un estilo muy característico y parecen cobrar vida en esos cuerpos delgados de expresiones fáciles e imposibles. Los aires circenses recuerdan a espectáculos que solo existen en la imaginación de estos artistas y que transitan estrechos caminos entre el pop y los trazos de un dibujo que delinea sus sobrecogedores y adorables personajes.
El mundo que construye la obra de Artemutante es un mundo hecho con amor y que no solo se intuye si no que se puede tocar. Al ver su trabajo uno no puede dejar de preguntarse, ¿y ahora qué habrá cuando abramos el próximo telón?
Artista de la semana
Artesano mutante
“Desde el primer juguete hasta la escena teatral del hombre se crea un ‘segundo mundo’ en el que él, jugando, duplica
su vida, se apropia de ella emocionalmente, estéticamente, cognitivamente.
En esta orientación cultural, los elementos
de juego estables —el muñeco,
la máscara— desempeñan un papel psicológico-social enorme. De ahí
las posibilidades extraordinariamente
serias y amplias inertes al muñeco
en el sistema de la cultura”.
Iuri M. Lotman
Literato y semiólogo