Winner Zeballos crea una poética de la destrucción
Después de 6 obras de las 12 que realizará en un año, el teatrista reflexiona sobre su proyecto: ‘Dodecalogía de la destrucción’.
Destruir y crear son parte de un movimiento continuo y la relación de estos dos términos es una de las revelaciones del proyecto Dodecalogía de la destrucción, del teatrista Winner Zeballos. El reto que se propuso lograr es montar 12 obras, una por mes, durante un año. Comenzó en enero con Playback 28. Y presentará la séptima parte, La barbarie / El texto, el 20 y 21 de julio en una de las salas de ensayo del Teatro Municipal a las 21.00.
“Las obras están pensadas como elogios o poetizaciones de la destrucción, del deshielo, el río Choqueyapu o de todo lo que podría causar aniquilación. Es como actuar por oposición, lo que genera preguntas interesantes en el espectador”.
Al obligarse a producir a un ritmo más acelerado, Zeballos encontró la conexión indirecta que hay entre la creación y la destrucción y los entiende como parte de un todo.
Para lograr su objetivo, el actor y director adaptó sus puestas en escena para que funcionaran en lugares completamente distintos. Desde teatros municipales, espacios culturales alternativos, discotecas, bares, salas de ensayo y casas.
“No necesariamente se tiene que esperar un lugar en concreto para presentarse, se pueden adaptar muchos espacios. También aprendí a ser más flexible con el presupuesto. Trabajamos con lo que teníamos a mano y eso ayudó mucho a que la creación cobre más profundidad”, comenta el teatrista.
La colaboración fue otro aspecto que contribuyó a que las obras pudieran realizarse. Si bien el concepto partió siempre de la idea original, los invitados enriquecieron el universo ficcional, desde diferentes áreas.
Participaron más de 12 creadores —Juan Carlos Arévalo, Carlos del Águila, Rosa Caballero, Jazzmany Vásquez, entre otros— desde la danza, performance, teatro, artes visuales y la música: “En determinado momento mi participación tuvo más que ver con canalizar ideas, darle orden y aprender de ellos”.
Y si bien las obras pueden ser efímeras, quedan las relaciones y la red que se ha ido formando a partir de la Dodecalogía de la destrucción.
En cuanto a su escritura, la continuidad le permitió vislumbrar clichés y lugares comunes en su trabajo. Adquirió experiencia que ahora aporta a su visión del quehacer teatral como un oficio artesanal.
La séptima obra, cuyo texto ya se escenificó en 2014, fusiona la realidad y la ficción. Participan Patricia García, Pedro Grossman, Freddy Mendizábal y Sergio López.
Trata de dos actores y una actriz que se reúnen para leer La barbarie, un texto que encontraron por casualidad. Éste narra la historia de otras tres personas que están encerradas en una habitación mientras que afuera, en La Paz, el caos y la violencia se desatan.
“Hablamos sobre relaciones humanas, sin esconderlas. La realidad se filtra en la ficción —se menciona que Paty García fue pareja de Pedro Grossman y ahora tiene una relación conmigo— y se entremezclan los juegos de seducción y poder que establecen los personajes”.